El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a atacar a la inmigración en su primer discurso ante una sesión conjunta del Congreso, este martes, con un discurso repleto de golpes de efecto, en el que repitió los postulados que le llevaron a la Casa Blanca.

Trump puso a la inmigración como la causa de todos los males en Estados Unidos. “Imponiendo las leyes migratorias aumentarán los salarios, ayudaremos a los desempleados, ahorraremos miles de millones de dólares y haremos seguras nuestras comunidades”, dijo el presidente.

 El mandatario dejó claro que su propuesta pasa por establecer un sistema de inmigración "basado en el mérito", frente al "obsoleto" actual, para proteger a los trabajadores de EEUU. Sorprendió cuando pidió colaboración a los demócratas para llevar a cabo sus planes.

Que los refugiados "vuelvan" por donde han venido
Trump defendió impedir la entrada a ciertos extranjeros para evitar que se forme una "avanzadilla" terrorista dentro de EEUU, al reiterar su intención de aprobar nuevas medidas que sustituyan a su polémico veto a ciudadanos de siete países de mayoría musulmana y a todos los refugiados que diferentes instancias judiciales bloquearon a principios de este mes. Además, sostuvo que la "única solución a largo plazo" para resolver crisis humanitarias como la de los refugiados es que esas personas "puedan regresar a salvo" a sus hogares.

El muro en la frontera comenzará pronto
También aseguró que la construcción del muro en la frontera con México comenzará pronto, incluso "antes de lo programado", y será "un arma muy eficaz contra el crimen y las drogas". Y recordó las historias de varias personas asesinadas por inmigrantes indocumentados a cuyos familiares invitó a presenciar el discurso desde el palco de la primera dama, Melania Trump.

Más dinero para armamentos
En materia de seguridad, Trump pidió al Congreso uno de los mayores aumentos del gasto en defensa de la historia del país, con el objetivo de reconstruir las Fuerzas Armadas.

De acuerdo con la Oficina de Presupuesto de la Casa Blanca, ese aumento de recursos para el Pentágono de cara al nuevo año fiscal será de casi un 10 %, equivalente a 54.000 millones de dólares y compensado con recortes en la mayoría del resto de las agencias federales, entre ellas el Departamento de Estado.

Trump recordó al soldado de las fuerzas especiales William "Ryan" Owens, fallecido en una operación contra Al Qaeda en Yemen, la primera aprobada por Trump desde su llegada a la Casa Blanca el pasado 20 de enero.

El plan para eliminar el Obamacare
El presidente estadounidense volvió a hablar de su promesa de eliminar la conocida como Obamacare, la reforma sanitaria del anterior presidente, Barack Obama, y solicitó a los congresistas que la reemplacen por un plan que amplíe la cobertura médica y baje los costes de los seguros.

Por otro lado, el magnate adelantó que está preparando "una reforma tributaria histórica", que bajará la tasa impositiva a las empresas y proporcionará un "alivio fiscal masivo" a la clase media. Con respecto a sus planes para invertir en infraestructuras y crear con ello "millones de nuevos empleos", Trump pidió al Congreso que apruebe una partida de un billón de dólares, dado que hacen falta "nuevas carreteras, puentes, túneles, aeropuertos y ferrocarriles".