En esta supuesta nueva era de la política, en la que han irrumpido formaciones nuevas que llevan por bandera la transparencia y medidas como bajadas de sueldos o eliminación de privilegios, son muchos los cargos públicos que han entendido estas propuestas como algo más que una necesidad y se las están aplicando.

El problema llega cuando una persona renuncia a sueldos de cara a la galería, para hacerse un buen traje entre la opinión publica, pero luego, de tapadillo, sigue disfrutando de ciertos privilegios.

Este es el caso del alcalde de Boadilla, Antonio González Terol, que ha repetido hasta la saciedad entre los ciudadanos su decisión de renunciar al sueldo como alcalde, pero lo que no ha dicho es que sigue manteniendo un coche oficial conducidos por dos policías municipales que le hacen a la vez de escoltas, tal y como ha denunciado la oposición del Consistorio.

El juego de quedarse con el sueldo más alto

El popular, bien conocido por ser uno de los últimos discípulos de Esperanza Aguirre, el último aguirrista, es en la actualidad diputado nacional y alcalde de uno de los epicentros de la Gürtel. Tal y como reza la Ley Orgánica del Régimen Electoral General, una misma persona puede ocupar a la vez estos dos puestos pero se debe renunciar a uno de los sueldos.

Es aquí donde Terol, quedando bien con sus vecinos de Boadilla, renunció a los 55.000 euros que iba a cobrar como alcalde quedándose (desde julio de 2016) su sueldo como diputado. Ahora, Terol es diputado con dedicación exclusiva en el Congreso y alcalde a tiempo parcial y, con ello, se embolsa cerca de 80.000 euros al sumarle las dietas por seguir asistiendo a las juntos de Gobierno y los plenos del Ayuntamiento.

Sólo como diputado cobra 2813,91euros mensuales por asignación constitucional y por ser portavoz de una comisión1046,47 euros. Hay que sumarle la indemnización como exdiputado Diputado por Madrid, que son 869,09 euros al mes.

Partiendo de la base de que Terol no está recayendo en ninguna ilegalidad, la oposición en Boadilla sí se ha llevado las manos a la cabeza al comprobar un dato que consideran cuanto menos sorprendente y poco lógico: que su querido alcalde a tiempo parcial, porque prefiere dedicarse en cuerpo y alma al Congreso, sigue echando mano de los privilegios del Ayuntamiento.

¿Cómo? Teniendo dos policías municipales a su servicio que le hacen de chófer y escolta al mismo tiempo. Según se puede ver en los presupuestos municipales de Boadilla para el 2017, al servicio de Terol está un cabo-escolta con una retribución de 51.916.66 euros y otro policía 50.654.56 euros.

Según ha explicado a ELPLURAL.COM el grupo socialista en Boadilla, Terol “dispone de dos chóferes que son dos policías municipales que van con él constantemente”. “Ha renunciado a su sueldo de alcalde para acogerse al de diputado pero mantiene los privilegios del Ayuntamiento y eso no puede ser normal”, denuncia.

Desde Ciudadanos, aunque mantienen que es un hecho que no les consta plenamente, “de ser cierto” es “indignante” y se estaría demostrando que en el Ayuntamiento de Boadilla del Monte “hay un problema de coherencia”. “No lo he visto con mis ojos” pero “en Boadilla estamos acostumbrados a ver escenas dignas de una película de Berlanga”, ha asegurado el portavoz de Ciudadanos.

Y es que, “él no está a tiempo completo, es más, no se le exige estar en el Ayuntamiento” y por eso desde Ciudadanos no pueden entender como no renuncia a su coche oficial. Sobre todo si tenemos en cuenta que, como diputado, tiene derecho a una tarjeta de taxi con la que puede gastar hasta 3.000 euros al año en trayectos.

En el Ayuntamiento ven todo de otra forma. Según han explicado desde prensa del Consistorio a este diario, “una cuestión es no cobrar y otra que Terol no siga trabajando al mismo ritmo. No tiene nada que ver por que él sigue haciendo las mismas funciones” y por eso tiene derecho a los coches oficiales para desplazarse. "El alcalde ha renunciado a su sueldo como a alcalde, no a su trabajo como máximo responsable municipal, que sigue siendo el mismo independientemente de la remuneración que perciba del Consistorio. La anterior legislatura desarrolló sus tareas como regidor siendo diputado autonómico, y ahora las realiza siendo diputado nacional".

Terol "lo que ha hecho, al no poder cobrar dos, ha elegido un sueldo. No es que esté trabajando la mitad o trabajando menos”, y añaden que Terol “usa el coche porque trabaja por los vecinos de Boadilla. El alcalde no deja de ser alcalde en ningún momento de las 24 horas”.

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Compañeros sin sillas ni mesas

Quizás sea más fácil de entender la sorpresa de la oposición al contar que hay grupos en el Ayuntamiento que no es que no tengan coches oficiales, sino que hasta han renunciando a las tarjetas de aparcamiento.

Es el caso de Alternativa por Boadilla, que tras haber renunciado en varias ocasiones a estas tarjetas, este año el Ayuntamiento no se las ha entregado, parece ser que para no puedan presumir de renunciar a ellas. Por eso creen que es “un escándalo, máxime cuando el alcalde tiene Dedicación Exclusiva en el Congreso”.

Los miembros de Ciudadanos también prefirieron no hacer uso de ellas. “Hemos renunciado a nuestras tarjetas de aparcamiento para nuestros coches personales. No queremos ese tipo de privilegios. Yo cuando voy al Ayuntamiento, voy con mi coche y pongo mi ticket como cualquiera”, ha relatado a ELPLURAL.COM el portavoz de la formación.

Pero hay más, según ha denunciado la formación naranja, uno de sus compañeros no tiene siquiera una silla y una mesa para trabajar. “Lo llevamos solicitando un tiempo y no hemos tenido respuesta. Tenemos un concejal que no tiene ni mesa ni silla y está igual que el alcalde a tiempo parcial”.