Uno de los puntos más controvertidos que abordó Cándido Conde-Pumpido durante su intervención en un foro de Vanity Fair este miércoles fue el proceso por el accidente del Yak-42, ya que como Fiscal General lo vivió muy de cerca (el accidente fue en mayo de 2003 y él llegó al cargo en 2004).

No ve "factible" la reapertura del Yak-42
Recordó Conde-Pumpido que la Fiscalía General defendió entonces la reapertura del caso por el que abogaban las familias de las víctimas y se abrieron dos vías: por un lado la de las identificaciones erróneas y por otro la de las responsabilidades por las subcontrataciones del avión siniestrado. La primera vía acabó con condenas y después con indultos del Gobierno del PP, por lo que apuntó que eso ya fue "una decisión política". Sobre la segunda fue archivada sin determinar responsabilidades penales y apuntó que la Fiscalía no entendió entonces que Federico Trillo debiera asumirlas, si bien "otra cosa son las responsabilidades políticas".

El magistrado del Tribunal Supremo apuntó que no ve "factible" la reapertura del caso y ve "prácticamente imposible" retomar la vía penal. Recordó asimismo que en Zaragoza se abrió un proceso civil por parte de las familias que acabó con indemnizaciones. "Desde el punto de vista penal las responsabilidades están zanjadas", insistió, por lo que entiende que el dictamen del Consejo de Estado tiene más un "carácter moral".