Ahora que el Partido Popular gobierna en minoría, apuesta por el diálogo para buscar el consenso. No les queda otra. En esta ocasión, el objetivo es más que reseñable, pues tal y como ha anunciado el Ministerio de Sanidad este miércoles, quieren preparar una ley que frene el consumo de alcohol entre los menores.

Con ello, no sólo se buscaría el consumo cero, sino abrir un debate para conseguir que la sociedad y los menores de edad en particular sean conscientes del riesgo que acompaña al consumo de alcohol. Una realidad que ya consiguió el Gobierno de José Luís Rodríguez Zapatero tras aprobar la ley antitabaco.

Así lo ha anunciado en el Congreso la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, en respuesta a una pregunta del PNV. El Partido Nacionalista Vasco ha querido saber qué medidas va a adoptar el ejecutivo de Rajoy para paliar el preocupante aumento del consumo de alcohol en menores. "Queremos progresar con paso firme y decidido en el objetivo común de consumo cero entre los menores", ha dicho.

Consumo cero o más tardío

Elevar la edad de inicio del consumo, reducir el acceso de los menores a esta sustancia, garantizar su salud y evitar que un consumo temprano comporte una adicción o una dependencia posterior, son algunos de los objetivos a alcanzar.

Para prevenir el consumo, la ministra ve fundamental la colaboración de la familia y la escuela, pero además plantear alternativas de ocio y tiempo libre atractivas, sin asociarlas al consumo de alcohol. Para sensibilizar a la sociedad aboga por instaurar un debate para que "todos tomemos conciencia real del riesgo para la salud del consumo de alcohol por nuestros menores".

Como ya se hizo con el tabaco

De lo que se trata, según sus palabras, es que sea un debate de la sociedad, similar al que se abrió con tres leyes muy significativas, que se acordaron en su día por unanimidad: la de violencia de género, la ley del tabaco y la seguridad vial.

La futura ley complementará así la actual regulación estatal, la autonómica y la local sobre el acceso y venta de alcohol entre los menores y sobre el consumo en espacios públicos y establecimientos de pública concurrencia. "Mientras nuestros hijos de 12 ó 13 años ingresan en los hospitales con comas etílicos, no podemos mirar hacia otro lado", ha exclamado la ministra, quien ha comenzado su intervención lamentando el fallecimiento de la niña de 12 años que murió recientemente tras sufrir un coma etílico.