Comprendo que algunos os echéis las manos a la cabeza comparando este título con la evolución bursátil de las últimas horas, pero voy a intentar explicarlo por aquí.

Cualquier cambio político fuerte (y lo de Trump lo es), origina ventas en las Bolsas: los cambios en lo que se conoce dan lugar a ventas. Los gestores de fondos saben muy bien adaptarse a cada circunstancia política pero, una vez adaptados, se desconciertan si hay cambios importantes. Ha habido un cambio importante en el país clave en el mundo empresarial y los gestores han decidido vender: ante un cambio que no estaba en lo previsible, lo mejor es marcharse a casa (vendiendo) y ganar tiempo para analizar este tiempo político nuevo.

Pero me permito anticipar lo que creo que va a pasar. Dentro de poco se comprobará que el Presidente Trump favorece al mundo empresarial con medidas concretas y tempranas en su mandato.

Que nadie olvide la historia empresarial de D.Trump. Hijo de millonario, amplió un imperio (fundamentalmente inmobiliario). Pero el nivel de endeudamiento y una crisis, llevó al imperio Trump a la bancarrota hace una decena de años. Los bancos acreedores se quedaron con la mayoría del patrimonio de Trump pero acordaron dejar en los edificios embargados la marca TRUMP como garantía de éxito en ese mundo del ladrillo.

Trump reune los restos de su patrimonio y la marca TRUMP y los saca a Bolsa. Un momento favorable y una capacidad de “venta” magnífica hacen que todos los activos de D.Trump multipliquen su valor en Bolsa hasta los niveles previos a la crisis. Hoy D.Trump tiene tanto o más patrimonio que cuando comenzó con los negocios de su padre.

Lo que conoce perfectamente D.Trump es el mundo de los negocios y especialmente el bursátil.

Creo que algunas de las primeras medidas como Presidente serán aquellas que puedan dinamizar la economía empresarial. Y la Bolsa se hará eco subiendo de forma importante.

Dad una pensada a este análisis justo ahora que las Bolsas bajan.