Cuando hablamos de minicreditos nos estamos refiriendo a un tipo de préstamo personal caracterizado porque se trata de cantidades pequeñas (normalmente entre 100 y 500 euros), de rápida amortización y con unos requisitos muy poco exigentes. Éste tipo de créditos está tomando un gran importancia en nuestra sociedad, tanto entre particulares como entre pequeñas empresas que hacen cada vez más uso de estos para poder llegar a fin de mes o afrontar ciertos desembolsos imprevistos.

El secreto de su éxito lo encontramos entre otros motivos en la dificultad que supone hoy en día que entidades bancarias te concedan un crédito ya que éstas buscan más la captación de capital que su préstamo. Además para que se decidan a concederlo has de reunir una serie de requisitos como avales, un buen perfil financiero y haber pasado por un examen de tus nóminas u otro tipo de ingresos. Muy al contrario, cuando solicitas un minicrédito apenas encuentras requisitos y no son necesarios los avales.

Otro de los motivos que explican por qué están triunfando tanto alrededor del mundo lo encontramos en las dificultades económicas que sufre gran parte de la población cuando de repente nos viene un gasto que no entraba dentro de nuestras expectativas económicas y necesitamos afrontarlo (una multa, recibos altos, impuestos, reparaciones, etc.) o incluso para poder costearnos totalmente o en parte algún capricho o unas merecidas vacaciones.

Todas estas ventajas las encontramos directamente en los caracteres del minicrédito y en este artículo subrayaremos algunas de las ventajas que encontraremos si decidimos solicitar un pequeño préstamo.

Solicitud online y durante las 24h

Para solicitar un minicrédito basta con tener acceso a internet. Da igual en qué lugar te encuentres, si estás de vacaciones, en casa o en la oficina, mientras tengas conexión vas a poder solicitar tu préstamo cómoda y rápidamente desde cualquiera de las muchas plataformas online de empresas dedicadas a la concesión de estos.

No sólo podrás solicitarlo desde cualquier lugar si no que las mayorías de plataformas  también te permitirán hacerlo en cualquier momento y cualquier día del año.

El proceso es rápido y muy sencillo

Cuando accedes a una de estas webs lo primero que encuentras es un simulador en el que podrás indicar la cantidad que necesitas y el tiempo que necesitas para devolver la cantidad prestada. Indicando esto se te mostrarán los intereses que vas a tener que reembolsar. Si estás conforme sólo tendrás que dar tus datos personales y enviar la solicitud del préstamo para que puedan así ingresarte la cantidad acordada.

Es además un proceso que te llevará muy poco tiempo ya que esta solicitud apenas tardarás en realizarla unos diez minutos y el tiempo de respuesta y de ingreso del crédito es igualmente veloz.

Flexible y personalizado

La solicitud de un microcrédito es también flexible ya que , como hemos indicado con anterioridad, tú mismo eliges la cantidad que quieres percibir y fijas el plazo en el que quieres devolverla, lo que convierte al microcrédito en una herramienta de préstamo muy versátil y hecha para cada persona y situación.

Es posible además que se dé el caso en el que tengas el dinero a devolver antes del momento acordado para finalizar el pago de tu préstamo. Será entonces también posible el abonar la cantidad en ese momento anterior al fin del contrato y así ahorrarte el resto de intereses que pudiesen surgir en ese periodo de tiempo.

Por otro lado, para el caso en el que no puedas hacer frente a algún pago existen muchas empresas de microcréditos que ofrecen también la posibilidad de prórroga de éste.

Amortización rápida

Al tratarse de cantidades pequeñas es mucho más sencillo el devolverlo en periodos de tiempo más cortos siendo así los intereses más bajos. Por lo tanto es recomendable elegir devolverlo en el menor periodo de tiempo en que nos sea posible para amortizar nuestro crédito mucho antes.

Cabe tener en cuenta que normalmente en las empresas que ofrecen este tipo de créditos online el periodo de devolución máxima no suele exceder de los 31 días y las cantidades a prestar suelen ser de un máximo de entre 300 y 500 euros.

A penas existen requisitos

Al contrario que lo que ocurre cuando pedimos un préstamo en una entidad bancaria al pedir un microcrédito no vamos a tener que superar un montón de requisitos para poder llegar a conseguir la cantidad de dinero que precisamos.

En primer lugar no se requiere en éste la presencia de un aval. Tampoco es necesario justificar tus ingresos y además no tienes porqué indicar para qué quieres ese dinero ni su finalidad.

Además cabe también indicar que se aceptan las solicitudes de microcréditos de personas que no se encuentran dentro del sistema crediticio por el hecho de pertenecer a las listas de morosos (como la de ASNEF).