Según la Encuesta de Población Activa (EPA), en el último trimestre de 2016 el empleo descendió en 19.400 personas respecto al trimestre previo, reflejando, a pesar de la campaña de navidad, el menor impulso turístico en este trimestre. No obstante, respecto a 2015 el empleo creció en 413.900 personas (un 2,29%), mientras el desempleo descendió en 541.700 personas (un 11,33%). El número total de desempleados se situó en 4.237.800, y la tasa de paro se redujo levemente hasta el 18,63%.

Los datos de cierre de 2016, ofrecidos esta mañana por el Instituto Nacional de Estadística, corroboran, según ha valorado el sindicato UGT, una mejora que se viene produciendo en algunos indicadores económicos y del mercado de trabajo. Es una realidad que la recuperación económica en España, impulsada por factores externos, está viniendo acompañada de un aumento en el empleo. Sin embargo, las cifras de cierre del año 2016 presentadas no pueden hacer olvidar que el paro, especialmente de larga duración, se ha enquistado en nuestra economía: más del 56% de las personas en paro lleva más de un año buscando empleo.

Empleo precario y estacional

Para el sindicato, no se ha dejado de producir, pese a algunos datos buenos, un avance de la precariedad en el desempleo, con una extensión del paro estructural, una tasa de cobertura en descenso (el porcentaje de beneficiarios de prestaciones deja fuera al 45% de los desempleados registrados en los Servicios Públicos de Empleo) y unas políticas de empleo, basadas en las bonificaciones a la contratación, que no están siendo efectivas a la hora de mejorar la empleabilidad de las personas, en especial de los jóvenes y de los mayores de 55 años.

Junto a esto, UGT señala a las estadísticas que corroboran que el empleo creado lleva una fuerte dosis de estacionalidad. Además, se extiende la precariedad en el empleo; sigue enquistada la temporalidad (con una tasa del 26,5%, en ascenso) y se afianzan la parcialidad involuntaria (60,5% de las personas con contrato a tiempo parcial lo aceptan de forma involuntaria) y otras formas de subempleo.

Por tanto, para UGT, los datos de hoy son insuficientemente alentadores. Más de 4 millones de parados, que elevan la tasa de desempleo hasta rozar el 19% y un constante aumento de la tasa de temporalidad hasta el 26,5% de los ocupados, son elementos que prueban la fragilidad del modelo. La crisis y la reforma laboral han dejado un rastro de precarización del mercado laboral y de los derechos de los trabajadores, produciendo un aumento de los niveles de desigualdad hasta situar a cerca del 30% de la población española en riesgo de pobreza y exclusión social. Aún cerca de 1,4 millones de hogares tienen todos sus miembros en paro.

Cambio de rumbo

La Unión General de Trabajadores considera imprescindible otra política económica y social, centrada en las personas. Una política que reduzca el desempleo, que cree empleo de calidad y con derechos, que mejore los salarios de la población de nuestro país, para estimular el consumo y la inversión y consigamos consolidar la recuperación, en una senda de crecimiento sostenible. ​

Se reduce la población activa

Cabe resaltar la trayectoria seguida por la población activa y la población inactiva. En el trimestre, la primera muestra un descenso de 102.400 personas (-0,45%) que justifica que se produzcan simultáneamente un menor empleo y un menor desempleo. La bajada de la población activa no es consecuencia de una menor población, recuerdan desde UGT; de hecho, la población mayor de 16 años ha crecido en el trimestre un 0,11%. Por tanto, el descenso de población activa se relaciona directamente con el aumento de población inactiva, que aumenta en el trimestre en 143.700 personas (0,92%). La tasa de actividad desciende de nuevo hasta el 58,95%.

El trimestre es positivo para los sectores de agricultura e industria, pero negativo para construcción y servicios. Queda reflejado el cambio de un trimestre marcadamente estacional, en el que el empleo viene impulsado por el turismo y la construcción, a un trimestre de menor actividad económica, a pesar de la temporada navideña. Así, el número de ocupados aumenta un 9,80% en el sector primario y un 1,89% en la industria, al tiempo que se reduce un 2,51% en la construcción y un 0,79% en el terciario.

Aumenta la población inactiva entre las mujeres

Por sexo, en el año, ha aumentado el número de ocupados, hombres (un 2,11%) y mujeres (un 2,50%) y ha descendido el paro entre los hombres y las mujeres (-12,25% y -10,42%). Pero se encuentran diferencias trimestrales. En el caso de las mujeres, aumenta la ocupación y desciende el desempleo, con una reducción de población activa y un incremento de la inactividad. Entre los hombres, desciende la ocupación y desciende también el desempleo, con a una fuerte caída de la actividad y un aumento significativo de la inactividad. La tasa de paro masculina se encuentra en el 17,22%, mientras la femenina es 3 puntos superior, del 20,25%. Un 50,6% de las personas en desempleo son mujeres.

Entre los extranjeros aumenta el empleo en términos anuales (un 3,06%), pero se reduce en el año (-0,20%), al tiempo que disminuye el número de desempleados y la tasa de paro, tanto en el trimestre como en el año. Un 15,5% de las personas en desempleo son extranjeras, con una tasa de paro que asciende al 24,66%, por encima de la media de la población española (17,83%).

Por grupos de edad, el paro disminuye en el año en todos los tramos, pero en el trimestre aumenta entre los hombres de 55 y más años (un 3,16%). Un 13,5% de las personas en paro tienen más de 55 años, mientras un 14,5% tienen menos de 25 años.

Desciende el empleo entre los jóvenes

La tasa de paro entre los menores de 25 años se sitúa en un 42,92% y entre los mayores de 55 años en el 16,06%.

Cabe destacar la destrucción de empleo anual mostrada en el grupo de jóvenes de 20 a 24 años, debido a la caída del empleo masculino. Además, cae la ocupación entre los 30 y los 40 años, masculina y femenina. En el trimestre, se produce un descenso del empleo entre los 16 y los 40 años, que ha afectado tanto a mujeres como a hombres.