La cadena COPE ha perdido un total de 153.000 oyentes, según los resultados del último Estudio General de Medios [EGM].
Pero lo que más ha alimentado desánimo de la cadena ha sido la cuantiosa pérdida en el programa de Carlos Herrera: 116.000 oyentes, lo que dificulta la renovación del comunicador almeriense, que tiene un contrato hasta 2018 con la emisora, y pensaba firmar en las próximas semanas por dos temporadas más.
Este mal resultado ha ensuciado los datos de récord registrados desde el regreso del periodista a la COPE [que le alejó de la SER con una ventaja de 300.000 oyentes] y ha provocado que decida tomarse con calma su renovación por la cadena episcopal.
Según publica Periodista Digital, existen dos versiones en relación a su renovación: una en la que se afirma que Herrera estaría dispuesto a rebajar las expectativas de los directivos de COPE y firmar sólo por un año más [en lugar de dos], y pidiendo una gran subida de sueldo, situada en un millón más de euros.
En la otra versión, [siempre según las fuentes internas de COPE] se niega que las exigencias de Herrera pasen por firmar a cambio de más dinero, sino por emitir en distinto horario: de 6 a 10 de la mañana, en lugar de 6 a 13 horas.
