Nueva polémica que azota a Televisión Española, a quien vuelven a acusar de manipulación. Esta vez ha sido durante una conexión en directo en Cataluña para la primera edición del Telediario del pasado sábado. Más concretamente en un registro realizado por la Guardia Civil en la sede del semanario El Vallenc. Resulta que esta publicación es sospechosa de encargar material a instancias de la Generalitat.

A raíz de este operativo de la Benemérita, un grupo de manifestantes acudió al lugar en el que se ubica el semanario con el fin de protestar contra estos registros. Al erigirse en noticia, las televisiones desplazaron sus tropas hasta esta ubicación. Aunque la polémica sólo le salpicó a TVE, pues una manifestante aprovechó para reivindicar detrás de la periodista.

Ante esta situación, el operador de cámara intentó sacar del plano a la manifestante. Durante un segundo, se ve un leve forcejeo entre los dos. La periodista de la cadena, Sandra Sangermán, anunció en directo que “nuestro compañero está sufriendo una agresión”.

Una agresión que creó polémica, pues las redes entonaron al unísono el mantra de “TVE ha vuelto a manipular”. ¿Por qué? Porque existe un vídeo en el que se ve al operador de cámara de la cadena ‘empujando’ a la manifestante para sacarla de plano para, posteriormente, forcejear entre los dos. A partir de ahí, la cámara apunta al suelo y no deja ver mucho más.

El CdI defiende a sus compañeros

Desde el Consejo, a través de un comunicado, transmite su apoyo “total al equipo de TVE en Barcelona”, puesto que sufrió “un intento de entorpecer su trabajo”. Denuncian que en el vídeo que ha trascendido no se muestra la secuencia completa de los hechos. El equipo desplazado a la Ciudad Condal cuenta con todo el respaldo del CdI y asegura que su prioridad e intención eran “satisfacer el derecho de los ciudadanos a ser informados”.

Además, en este mismo comunicado, el CdI condena “enérgicamente” este ataque vertido desde las redes sociales. Reconocen que los ciudadanos “tienen derecho a manifestarse”, aunque eso no anula “el de la sociedad a recibir información plural, independiente y no mediatizado”.