Me voy, pero me quedo; me quedo, pero me voy; dimito, pero luego vuelvo como El Almendro en Navidad…y así podíamos estar horas para definir la esperpéntica situación que vive estos días el pueblo albaceteño de Caudete (10.000 habitantes), donde por primera vez PSOE, Ciudadanos y Ganemos habían unido sus fuerzas para echar al alcalde del PP del ayuntamiento al estar este acusado de un presunto delito de prevaricación, como publicó el pasado día 12 de junio ELPLURAL.COM. Sin embargo, el partido de María Dolores de Cospedal en Castilla-La Mancha dice haber alcanzado un acuerdo con la formación de Albert Rivera, mediante el cual “José Miguel Molla Nieto dejará la Alcaldía temporalmente durante seis meses, así como cualquier Delegación de gobierno Municipal, dando tiempo para que la justicia tome una decisión sobre la adjudicación de la energía eléctrica a la empresa Fox, con dicha condición Ciudadanos ha adquirido el compromiso de abandonar la Moción de Censura” (sic).

Ciudadanos niega la mayor

Pero el comunicado emitido este martes por el PP de Caudete ha caducado apenas transcurridas unas horas. El tiempo suficiente para que el portavoz de C’s en el ayuntamiento caudetano, José Vicente Alagarda, firmante de la moción de censura junto a otros nueve concejales de la oposición, desmintiera el comunicado genovés, asegurando que “la moción de censura, de momento, sigue adelante. Para retirar el apoyo a la moción es imprescindible la dimisión de José Miguel Mollá como alcalde, concejal y diputado provincial; algo que no se ha producido, con lo que sigue adelante la moción”. Por su parte,  Mollá insiste en que el acuerdo es firme, pero que él no ha formado parte del mismo, asegurando que ha sido un pacto entre las direcciones regionales de Ciudadanos y el PP.

El alcalde conoce los tiempos judiciales

Lo sorprendente de este asunto no es ya el desmentido de Ciudadanos, que mantiene, al menos con la boca pequeña, la moción de censura contra el regidor “popular”, suscrita por los cinco concejales del PSOE, tres de Ganemos, además de Vicente Alagarda. No. Lo sorprendente es que el alcalde, presidente del PP en Caudete y diputado provincial parece conocer a la perfección los tiempos judiciales, como lo prueba esos seis meses de “dimisión temporal”. Da la sensación de que el regidor no sólo no conoce la fecha del juicio, sino que también da a entender que será absuelto. De ahí su anunciado regreso a la alcaldía para diciembre de este año, una vez transcurridos los seis meses determinados por José Miguel Mollá, según recoge el documento al que ha tenido acceso este periódico.

C’s debe comprometerse con la corrupción

Tal certeza ha llevado a Ganemos-IU a precisar: “Sabíamos que podía nombrar fiscales, pero no que también marcaba el tiempo de la actividad jurídica”. Y es que para estos tres concejales hay que apostar por un gobierno alternativo y han pedido a Ciudadanos que “se comprometa con la corrupción y con la palabra dada al firmar la moción de censura”. Para la filial de Podemos, el  “alcalde no debe sentarse en el pleno provincial”, añaden, “le pedimos que dimita de todos sus cargos y que el PP, en vez de intentar argucias legales para saltarse la moción de censura, le cese como diputado provincial”, ha reclamado la diputada de Ganemos-IU, Victoria Delicado en una rueda de prensa, acompañada del coordinador provincial de IU Albacete, Cristian Ibáñez, quien ha apuntado que la resolución de la alcaldía por la que Mollá nombra a una “alcaldesa en funciones” es “nula de pleno derecho” y que Ganemos Caudete está preparando un contencioso-administrativo para anularla.

Medio millón de euros a dedo

Lo que está claro es que el alcalde del PP lo tiene muy mal si al final se confirma, como él mismo reconoció, que concedió un contrato a dedo por valor de medio millón de euros, cuando la Ley de Contratación sitúa la cantidad que un alcalde pude otorgar por una obra, servicio o aprovisionamiento no superior a los 18.000 euros. Así las cosas, el Grupo Socialista lamenta que el pueblo esté “viendo como su prestigio a nivel provincial y regional se está viendo afectado gravemente por las malas actuaciones de José Miguel Mollá”, añaden, “recordemos que a  Mollá ya le dijo un juez que, cuando quiso sacar a concurso a la empresa pública Geursa, podía estar cometiendo un fraude, y ahora otro juez le investiga por un delito de prevaricación administrativa por adjudicar a dedo 500.000 euros en contratos de luz a la empresa Fox Energía”.