La unanimidad no es habitual, pero tampoco imposible. Por primera vez todos los grupos del Parlamento andaluz confirmaban ayer su apoyo a la proposición de Ley de Senderos promovida por Podemos, que será votada este jueves convirtiéndose en la primera ley de un grupo de la oposición aprobada en la presente legislatura en la Cámara andaluza.

El texto de la formación morada fija el marco regulador a partir del cual se van a desarrollar las diferentes funciones sociales, económicas, culturales, educativas y deportivas de los senderos en Andalucía, garantizando que las mismas se realicen en un entorno seguro, sostenible y acorde con el mantenimiento y preservación del medio ambiente, así como una utilización racional de los recursos naturales, y compatibles con los diversos usos que se establezcan.

Señalización unitaria

La ley propicia la creación de una red de senderos de uso deportivo de Andalucía y su integración en las redes nacionales e internacionales, la ordenación de la actividad deportiva del senderismo desde la protección y conservación del medio natural, además de homogeneizar la señalización de todas las vías y caminos aptos para la práctica del senderismo deportivo

Con este nuevo instrumento jurídico, los poderes públicos de Andalucía perseguirán, en base a las competencias que les sean propias, en las actuaciones que realicen en materia de senderos, de conformidad con la presente ley, su normativa de desarrollo y otras normas que resulten de aplicación, la consecución de objetivos como el fomento del conocimiento del medio natural y su uso y disfrute adecuado, así como la recuperación de patrimonio viario tradicional y la conservación de las antiguas vías de comunicación, además de otros elementos ambientales y culturales directamente vinculados a ellas.

Distintos usos

En virtud de esta ley, se distinguen entre los usos principales de los senderos los de tipo medioambiental --en aquellos que tengan por objeto el acercamiento de los visitantes a los valores naturales y culturales de un espacio natural de una forma ordenada, segura y que garantice la conservación y difusión de tales valores por medio de la educación y la interpretación ambiental--; deportivo --entre aquellos senderos que sean señalizados, homologados y autorizados a los efectos de la práctica deportiva--, y turístico.

La posición de los grupos

Por parte del Grupo Socialista, la diputada María Luisa Bustinduy ha recordado que en su toma de consideración su formación votó en contra por entender que era un texto "inadecuado", pero que gracias a un trabajo de "diálogo" y "consenso" posterior se ha conseguido modificar su texto introduciendo "todas las enmiendas" presentadas por los socialistas para que en la ley no entren en "colisión" distintos intereses "legítimos". Por ello, ha agradecido la "generosidad" del proponente, David Moscoso.

En representación del PP-A, la parlamentaria Rosario Alarcón ha defendido el senderismo como una práctica deportiva "muy saludable que se debe respaldar sin fisura" y que puede generar un impacto económico positivo para la comunidad autónoma. No obstante, ha explicado que para apoyar esta ley, su grupo exige "respeto y reconocimiento de los usos tradicionales agrarios y forestales", y ha presentado una enmienda 'in voce' para que los senderos "solo discurran por bienes de dominio público". Cumplidos esos requisitos, "nos sumaremos encantados" a la aprobación de ley, ha dicho la 'popular'.

Por parte de Ciudadanos (Cs), el diputado José Antonio Funes ha admitido que alcanzar un consenso en relación a esta ley ha resultado "complicado" y ha supuesto "mucho esfuerzo", si bien ha señalado que hay "muchas más razones para el acuerdo que para el desacuerdo", y ha resaltado que lo importante de esta ley es que con ella "los senderos se van a regular", lo cual va a resultar una herramienta útil que "va a ayudar" a la industria y al empleo de Andalucía.