No era una plaza fácil pero Pedro Sánchez salió victorioso de su incursión en ella. Ciertamente, Cádiz es junto con Sevilla la provincia donde son más numerosos y están más organizados los críticos con la secretaria general, Susana Díaz, que precisamente hoy ha desvelado que anunciará su candidatura a las primarias el próximo día 26.

Para despejar las dudas de quienes temen que si pierde las primarias podría impulsar un escisión del PSOE, Sánchez dijo que si resulta ganador de las primarias exigirá “la misma lealtad al resto que me exigiré a mí mismo, porque, por experiencia, sé lo que significa debilitar al secretario general y dar fuerza a la derecha". La alusión a la presidenta andaluza era obvia. Y añadía: "El día después de las primarias, todos a trabajar detrás de nuestro secretario general para derrotar a la derecha".

El apoyo de Anne Hidalgo

Antes de comenzar su intervención, y como aperitivo que hizo las delicias de sus seguidores, se proyectó un vídeo donde la alcaldesa de París y gaditana de origen, Anne Hidalgo, mostró su apoyo a Sánchez porque la “socialdemocracia europea necesita” líderes como él.

También subrayó el ex secretario general que “nunca un socialista” será su adversario, aunque cabe decir que no era precisamente ese el clima entre los seguidores que habían acudido a Cádiz, como tampoco lo era entre quienes varias semanas atrás habían asistido al acto celebrado en Dos Hermanas. Al menos en Andalucía, a los seguidores de Sánchez les une no solamente el genérico ‘no es no’, sino el más específico de ‘Susana no’.

Contra ‘la gran coalición’

Consciente de que su gran baza es identificar a Díaz como ‘la derecha’ del partido, Sánchez eludió cualquier referencia implícita o indirecta a Patxi López, el tercer candidato en discordia y que inicialmente se contaba entre sus principales apoyos: "Solo hay dos opciones, la abstención a Rajoy o un PSOE de izquierdas". Y, en otro momento, remachaba con esta frase: "La gran coalición es una gran contradicción y va en contra de nuestros valores ". Y con esta otra: "Necesitamos un PSOE unido a su historia, sus afiliados y no unido a la derecha".

Entre las promesas del candidato, las consultas obligatorias a la militancia; las listas cremallera, la ejemplaridad ante la corrupción y que las gestoras tenga una duración máxima de 90 días.