Hay quien dice que los resultados del PP en Galicia merecerían un estudio sociológico exhaustivo. La herencia de Manuel Fraga Iribarne aparece una y otra vez en cada cita electoral. Esta pasaba por fiestas y llamadas al cierre de filas porque si no vendrían los malos a acabar con el supuesto 'bienestar' del que gozaban -en su época y más allá- aquellas tierras. 

Este viernes se puso el punto y final a la campaña. Los gallegos, al igual que los vascos, acudirán mañana a las urnas y, en muchos casos, lo harán sujetos a un paisanaje que los populares se atribuyen. Una especie de patente de corso que sitúa al resto de aspirantes y formaciones como una especie de advenedizos en su tierra. 

Filosofía 'popular'

La filosofía la resumió en el acto de cierre del PPdeG su líder a nivel nacional. Mariano Rajoy tiró de manual propio (frases míticas) y ajeno (Fraga Iribarne) para llamar a las urnas a sus 'paisanos': "Ahora a reflexionar, a votar y a hacer amigos que es como se gana".

Encierra la frase una invitación a las próximas comilonas, a los autobuses pagados para llenar las romerías, las pancartas en los mercadillos con lemas como "eres el mejor", de dentro de cuatro años. 

Es Galicia y, a pesar de que en su propia ciudad ha recibido las mayores humillaciones ('persona non grata' y agresión de un joven), Rajoy se siente a gusto y ganador. 

Así lo dejó patente en su intervención en el acto de fin de campaña de Núñez Feijóo. A la anterior frase sumó otra recogida por la periodista Lucía Méndez en un tuit que corrobora la vuelta al pasado más fraguista, eso sí, envuelto en la oratoria particular del presidente en funciones: "Me gusta la gente, siempre aporta. Aquello de Robinson Crusoe tiene que ser durísimo".

Un regreso al pasado del 'amiguismo' y de estar cerca de la gente con un claro fin partidista. Rajoy volvió a ser Rajoy, pero en su tierra y ante los 'suyos'. Precisamente ese dato, el de los 'suyos', separa la gracia del ridículo, un lugar en el que al líder del PP le ha situado en más de una ocasión su 'fina oratoria'. 

Basta recordar su particular pronóstico de la última final de la Liga de Campeones disputada por Real Madrid y Atlético de Madrid...

Y qué decir de su alusión a los españoles, las alcachofas y los memes surgidos tras otra de sus metáforas 'rajoynianas'.

La lógica 'mariana' también le ha llevado a asegurar con contundencia que "por las carreteras tienen que ir coches y de los aeropuertos salir aviones", o a plantearse misterios que nadie ha podido resolver como de dónde viene la lluvia.

 

En este apartado no se puede olvidar una de sus afirmaciones más internacionales, por su repercusión. La pronunció junto al alcalde de Benavente y pretendía lanzar elogios al primer edil: "Es el alcalde el que quiere...".

El elenco de frases célebres es mucho más amplio. Al margen de la ironía, en el Partido Popular verán con buenos ojos afirmaciones como las pronunciadas ayer en el cierre de campaña de Galicia, al fin y al cabo, gracias a ellas en la actualidad Mariano Rajoy es una de las estrellas de las redes sociales y Youtube