Al final se ha admitido a trámite el análisis de la recusación presentada por el abogado de Pablo Crespo, presunto número dos y mano derecha de Francisco Correa en la trama Gürtel para recusar al magistrado José Ricardo de Prada, a pocos días de que este asunto inicie su recorrido judicial. Según la providencia a la que ha tenido acceso ELPLURAL.COM y que puede consultar en este enlace, se hace un llamamiento a las partes para que “se adhieran” u “opongan” a la petición.

En condiciones normales, y a la vista de las supuestas pruebas para avalar la recusación, en fuentes jurídicas no se considera probable que los tres jueces encargados de resolver la petición den el visto bueno a la solicitud.

Campaña de desprestigio

No obstante, existen sospechas en esos círculos consultados por este medio de que, en efecto, podrían producirse más adhesiones, algo que se sitúa dentro de una campaña contra De Prada, magistrado calificado de progresista y al que consideran como uno de los más firmes en la lucha contra la corrupción.

Cabe recordar que esta maniobra, presentada a última hora por Miguel Durán, abogado de Pablo Crespo, es vista por algunos especialistas como un intento a la desesperada para tratar de paralizar, o al menos retrasar en los posible, el inicio del juicio correspondiente a la primera parte o época de la conocida como trama Gürtel, la llamada pieza 1999-2004 y que debiera comenza a verse en la Audiencia Nacional el próximo 4 de octubre.

Los argumentos para la descalificación girarían en torno a la amistad que el juez de la Audiencia Nacional mantiene con Baltasar Garzón, mencionando su participación en actos organizados por la Fundación del otrora magistrado al que Correa, supuesto número 1 de la Gürtel, y otras partes lograron inhabilitar.

También algún medio

En esta tarea han jugado también un papel crucial 'las informaciones' del medio que dirige el periodista Eduardo Inda, en las que se pone en duda la independencia del juez Prada. El argumento base de estas 'noticias' es que la hija de Prada trabaja en uno de los despachos que participan en las acusaciones de otra de las piezas separadas de la Gürtel, la denominada 'caja B' o 'papeles de Bárcenas', pero que no está personada en la que ahora debe verse y sobre la que tiene que decidir, junto a otros dos magistrados, el juez Prada.

Tal y como recogió ELPLURAL.COM esta misma semana de fuentes jurídicas, el temor es que exista una campaña orquestada desde la derecha política, mediática y judicial contra De Prada “probablemente porque, como pasaba con Baltasar Garzón,aplica la ley. Es un excelente jurista que no tiene miedo a nadie ni admite componendas”, añadiendo que “en una sala en que el presidente y el ponente inicial Concepción Espejel y Enrique López han sido recusados por su proximidad al PP, es posible que haya cundido el temor entre quienes van a ser juzgados al encontrarse a un juez progresista junto a un presidente conservador, pero entendido en derecho y un tercer magistrado ecuánime y también buen jurista”. Un planteamiento realista, a la vista de los acontecimientos.