El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, tiene una extraña tendencia a compartir lugar y hora con integrantes del PP relacionados con el acoso sexual. De hecho, no se corta ni un pelo y los apoya públicamente sin pudor alguno.

Este martes le hemos visto por las calles de Galicia, concretamente haciendo la ruta del Miño, junto a José Manuel Baltar, imputado por cohecho, tráfico de influencias y por ofrecer trabajo a cambio de sexo. El propio Rajoy se ha encargado de dejar claro que, a pesar de todo ello, respalda al presidente del PP y de la Diputación de Ourense y ha anunciado a los cuatro vientos que fue su compañero de caminata mañanera.

Pero Baltar no es el único que ha recibido el apoyo de Rajoy. El pasado 19 de junio el líder popular, en plena campaña, visitó Lérida y mostró su apoyo públicamente a José Ignacio Llorens, quien era socio del extesorero Luis Bárcenas, aparecía en los papeles de Bárcenas y fue denunciado en noviembre de 2011 por "intentar mantener relaciones íntimas" con una militante del PP, según el acta de conciliación que se resolvió en el Juzgado de Primera Instancia número 96 de Madrid.

En esta ocasión, el asunto quedó zanjado en marzo de 2013 después de que Llorens, que siempre negó los hechos de los que se le acusaban, llegara a un acuerdo con la demandante en un acto de conciliación.

No puede decir lo mismo Baltar, cuyo padre, José Luis Baltar, expresidente de la Diputación de Ourense, tendrá que ir a declarar a finales de septiembre para esclarecer los hechos de los que se le acusan a su hijo: ofrecer trabajo a cambio de sexo.