El periodo medio de pago de las operaciones comerciales entre pymes sigue moderándose en este primer trimestre del año, descendiendo hasta 79,4 días, más de un día menos respecto al anterior trimestre. Según los datos del último boletín de morosidad y financiación empresarial de Cepyme, este registro supone un nuevo mínimo en la serie que la patronal empezó a elaborar en el primer trimestre de 2008.

La proporción de deuda comercial en retraso de pago sobre el periodo legal se coloca en el 71,5%, con lo que ha aumentado dos décimas, si bien las empresas encuestadas prevén que el comportamiento de la morosidad mejore en el segundo semestre del año, ya que lo relacionan a la favorable evolución de la economía en general. El porcentaje de pymes que poseen más del 10% de su facturación en riesgo de cobro ha disminuido del 9 al 6%, lo que se puede asociar a la recuperación económica. También ha disminuido el porcentaje de empresas que declara que el importe de las facturas que no cobrará nunca es menor al 1% de su facturación.

Cepyme considera que la mejora del plazo medio de pago es lenta y que la proporción de deuda comercial en mora es alta, por lo que reclama que se reduzca el periodo legal de 60 días para los pagos entre empresas para acercarlo al de otros países europeos como Alemania (25 días), Francia (40 días) o Portugal (50 días). También solicitan que se eleven las sanciones a las entidades que se presentan indicadores de solvencia y liquidez suficiente para cumplir sus obligaciones de pago, pero que retrasan sistemáticamente el abono de sus deudas con proveedores. 

Por otra parte, las condiciones de financiación para las pymes han mantenido durante el primer trimestre del año la tendencia de mejora que se viene observando en los últimos años, gracias a un contexto de tipos de interés bajos.

Según el informe, los principales canales de financiación de las pymes son el bancario (33,7 % ), seguido de los beneficios retenidos y la venta de activos (31,1 %) y de los fondos propios y el capital riesgo (14,4 %). 

En cuanto a los resultados de la encuesta periódica que realiza Cepyme, muestran que las pymes también perciben un ligero incremento de las garantías y avales exigidos por las entidades financieras, así como de los gastos y comisiones asociadas, que achacan la caída de la rentabilidad del negocio bancario. En consonancia con ello ha aumentado la cantidad de dinero ofrecida para el crédito y por otra parte se ha reducido el tiempo entre la solicitud de la financiación y la respuesta de las entidades financieras. 

El informe destaca que la posicion relativa de España frente a sus socios, en comparación con el resto de paises europeos, ha mejorado sobre todo en la disposición de las entidades crediticias a facilitar crédito a las pymes.