El Partido Popular no sólo ha anunciado de inmediato que va recurrir el auto por el que la titular del Juzgado de Instrucción número 32 de Madrid les ha procesado por el borrado de los discos duros de los ordenadores de Bárcenas, de hecho ha salido en tromba a ‘contrarestar’ la noticia, incluida una campaña de cierto desprecio por la juez.

Jueces que se dejan guiar por lo que quieren

“Los jueces son seres humanos, tienen derecho a equivocarse.., a dejarse guiar por lo que sienten y lo que quieren”, ha insinuado Celia Villalobos en Antena 3, antes de recordar que esta es una “juez de primera instancia”. En realidad el mismo tono que una nota de prensa que ha sacado el equipo de comunicación de Génova que dirige el vicesecretario Pablo Casado, supuestamente el ‘nuevo PP’ frente al ‘viejo PP’ que en este campo judicial lideraba Federico Trillo.

La nota de prensa, en la que el PP se pone ‘estupendo’, arranca calificando el procesamiento del partido, su tesorera, su jefe jurídico y su responsable informático de “abiertamente infundada y contraria a derecho”.

A partir de ahí se asegura que la juez ha redactado su auto en la “creencia acrítica en las palabras de Bárcenas”, de quien dicen es una persona de “falta absoluta de credibilidad” y alguien que tiene como “único objeto dañar la imagen del Partido Popular”. Lo curioso es que el mismo PP que dice ahora esto publicó un comunicado en el mismo tono para defender a Bárcenas ante los ataques de la Justicia. Un comunicado en el que se podía leer que “el Partido Popular confía en la inocencia de Luis Bárcenas” y en el que se hacía un “reconocimiento a los más de 28 años de servicios de Luis Bárcenas a nuestro partido que han sido ejemplo de profesionalidad y buen hacer”.

El ministro de Justicia contra la juez

En su nota el PP habla ahora de que la juez ha fundamentado su decisión de procesar al partido y a sus directivos “sin la más mínima prueba que las avale”, lo que “genera una grave indefensión”. En el mismo sentido, horas después de la decisión de la jueza, nada menos que el ministro de Justicia en funciones, Rafael Catalá, ha dicho que no cree que el borrado tenga “ninguna trascendencia penal”, y ha justificado ese borrado (recordamos que se sometió a los discos duros a 35 borrados y uno de ellos fue incluso rayado) como “una gestión que seguramente hacen muchas empresas en España”.

En el mismo sentido Celia Villalobos insistía este miércoles en que “los ordenadores no son de Bárcenas, son del PP”. Olvidan la exministra y el ministro en funciones que la juez en su auto (que ELPLURAL.COM publicó íntegro este martes) recuerda que cuando se procedió al borrado sistemático de los discos duros, su rayado y su posterior lanzamiento a la basura, ya conocían que el juez Pablo Ruz había mostrado su interés en su contenido dentro de la investigación que llevaba a cabo por la existencia de una caja B en la contabilidad del PP.