El Museo del Ejército de Toledo se ha convertido en un foco continuo de conflictos laborales al negarse las empresas concesionarias de determinados servicios a respetar los derechos laborales, al mismo tiempo que ejecutan sin miramientos la reforma laboral aprobada por la mayoría absoluta del PP en la pasada legislatura. En este sentido, la empresa Clece, adjudicataria de la limpieza del Museo del Ejército, llevará a cabo un expediente de regulación de empleo con el que pretende reducir en dos terceras partes la jornada y el salario de las 18 trabajadoras que prestan este servicio. Y es que la empresa aduce que se ve obligada a presentar un “Plan de Adecuación de Recursos Humanos” porque así se lo exige el pliego de condiciones que reguló la concesión del servicio de limpieza en todas las dependencias del Ministerio de Defensa en toda España, según ha denunciado el sindicato CC OO.
Sólo dos tienen jornada completa
La central sindical señala que de estas 18 trabajadoras, sólo dos tienen ahora contrato por jornada completa; mientras que las otras 16 lo tienen por 30 horas semanales. De imponerse el ERTE que plantea Clece, sólo trabajarían –y cobrarían- 11 horas cada semana. Clece tiene suscrito con el Ministerio un acuerdo a cuatro años para ocuparse de la limpieza de todas sus instalaciones. Sin embargo, lo que respecta al contrato que tiene con el Ministerio para limpiar el Museo del Ejército de Toledo finaliza el próximo 31 de agosto. De ahí que los sindicalistas se pregunten “¿cómo vamos a acordar un ERTE hasta 2019 con una empresa que sólo tiene contrato en vigor hasta dentro de un mes?”.
“Una propuesta impresentable”
CC OO, que no se niega a estudiar la documentación y valorar la situación de los trabajadores, considera la propuesta, eso sí “impresentable, ya que no puede ser que los pliegos de condiciones sean cheques en blanco para que las empresas recorten empleo y salarios, para que las empresas cuadre sus cuentas de resultados y para que el Ministerio cuadre su presupuesto a cuenta de los trabajadores y de la calidad del servicio”, advierten. Este nuevo conflicto laboral en el Museo del Ejército se añade al que sufren desde hace meses los trabajadores de la contrata del servicio de conserjería, que iniciarán el primer fin de semana de agosto una huelga indefinida para exigir que les paguen las nóminas que les adeudan.
Huelga indefinida de conserjes
En este sentido, el malestar existente entre los 39 conserjes del museo es ya crónico por lo que iniciarán el fin de semana del 6 y 7 de agosto una huelga indefinida que se prolongará a partir de esas fechas durante todos los sábados y domingos sucesivos, con paros de dos horas de duración, entre las 12.00 y las 14.00 horas, cuando las instalaciones museísticas reciben más visitantes. La huelga ha sido convocada por CCOO para exigir a la empresa Proman, condenada varias veces por vulnerar los derechos de los trabajadores, el pago de las dos mensualidades que adeuda a su plantilla; así como el cumplimiento del compromiso de regularizar el pago de las nóminas que Proman asumió ante la Inspección de Trabajo el pasado mes de abril. “Esta empresa viene desde hace meses retrasando los pagos de las nóminas a sus trabajadores y acumulando a menudo mensualidades impagadas,” explica Antonio Alonso, responsable de CCOO-Construcción y Servicios en Toledo.
Chantajes y rebajas de sueldos
Los conflictos laborales son constantes desde que Proman se hizo con la contrata del servicio de consejería del Museo del Ejército. Nada más llegar se negó a subrogarse a los trabajadores de la anterior contrata y despidió a todos los que no aceptaron renovar sus contratos y rebajarse los sueldos, que apenas llegan a 700 euros al mes, incluyendo la prorrata de las pagas extra. “Ahora, cuando habíamos llegado a un acuerdo ante la Inspección de Trabajo para normalizar la situación al menos con el pago puntual de los salarios, nos encontramos con nuevos incumplimientos a costa de los trabajadores, que malamente pueden salir adelante con los salarios tan bajos que cobran y que lo están pasando muy mal, ellos y sus familias, cuando ni siquiera se los pagan y llevan casi tres meses sin ingresar nada”, denuncia CC OO.
Empresa mimada por Morenés
Proman, además, no es una empresa más del sector. No. Según investigaciones de la Guardia Civil, publicadas por ELPLURAL.COM, tuvo relación directa con los tenientes coroneles encargados de repartir un pastel millonario entre trece empresas y que fueron detenidos y encarcelados el 28 de abril de 2015. Uno de los mandos militares admitió ante el togado castrense haber recibido contraprestaciones por “asesorar” a las empresas concesionarias. Obsequios que iban desde dinero en metálico, a entradas para los toros, pasando por regalos de relojes de alta gama, etc. Tanto es así, que en un control de vigilancia policial al que estaban sometidos, a la salida de un restaurante donde los tenientes coroneles habían comido con directivos de Proman, encontraron a uno de ellos dos sobres con 2.000 euros cada uno (4.000€). Lejos de marcar distancias, Pedro Morenés, ministro en funciones de Defensa, no sólo protege a esta empresa sino que continúa otorgándole nuevas contratas.
