El Banco Popular presentará a finales de septiembre o comienzos de octubre un plan de reducción de personal de entre 2.500 y 3.000 empleados, que equivale entre el 16% y el 20% de su plantilla, según publica Expansión. El banco pretende acometer la reducción de plantilla con prejubilaciones y bajas incentivadas para evitar los despidos.

Tras la ampliación de capital 

La entidad, que presentará los resultados del segundo trimestre el 29 de julio, todavía tiene que fijar el número de prejubilaciones de los cerca de 3.000 empleados con más de 55 años con los que cuenta en su plantilla. También planea el cierre de sucursales y oficinas o la concentración de las mismas, ya que a cierre de año contaba con casi 2.000 oficinas, de las cuales 418 se encuentran entre Madrid y Barcelona.

Actualmente, Popular cuenta con 15.020 empleados después de que en la fusión con el Banco Pastor en 2011 redujera el número de trabajadores en un 17% y el de oficinas en un 23,5%. La dirección del banco considera que es el momento más adecuado para llevar a cabo estos recortes, después de cerrar con éxito la ampliación de capital. En junio, Popular captó 2.500 millones, con una sobredemanda del 35,75% gracias también al apoyo de la banca de inversión.

El Popular realizará provisiones gasta 4.700 millones de euros para cubrir los 2.000 millones que prevé de pérdidas al cierre de 2016.