El asesinato de un bebé de 45 días presuntamente a manos de su padre el pasado 24 de junio en Almería, refleja las carencias del sistema español en protección de violencia contra la infancia, una violencia intolerable según destaca en un comunicado la organización Save the Children.

La ONG recuerda que “la mayoría de  los casos de violencia contra los niños en España permanecen ocultos y no se denuncian. El hecho de que los mecanismos de denuncia existentes no sean conocidos ni accesibles para los niños es una de las principales causas de la invisibilidad de este drama”.

Sin datos desde 2014

La ONG critica además la falta de un sistema de recogida de datos que permita conocer el alcance del problema. Denuncian que los últimos datos disponibles son de 2014. “A lo largo de ese año, según el Ministerio de Interior, un total de 47 niños fueron víctimas de intentos de homicidio o asesinato. De ellos, 23 murieron (5 más que en 2013)”.

“ Hoy mismo se ha conocido que los tribunales españoles enjuiciaron en 2014 las muertes de ocho niños –dos eran gemelos- a manos de sus progenitores y dictaron siete sentencias, todas condenatorias, según el Observatorio del Consejo General del Poder Judicial”, continúan.

La Ley no da respuesta adecuada

A pesar de la reciente modificación de la Ley orgánica de protección del menor en 2015,  Save the Children considera que esta ley “sigue sin ser la herramienta adecuada para dar respuesta a todas las formas de violencia contra la infancia”. La organización exige una norma que abarque aspectos preventivos, de protección, de recuperación y reintegración a las víctimas menores de edad de manera específica.

Por último, Save the Children reivindica que gran parte de las medidas existentes “se ponen en marcha una vez el acto de violencia se ha producido. Además, la víctima tiene que revivir el trauma sufrido ante los órganos administrativos y judiciales y, en general, no se contemplan medidas de reparación específicas”.

Dos bebés asesinados en 2016

En el caso de este bebé de Níjar la  Guardia Civil encontró  al pequeño con un fuerte golpe en la cabeza, y aunque intentaron reanimarle, no consiguieron salvarle la vida. Ocurrió en una vivienda a unos dos kilómetros de Campohermoso en el término municipal de la localidad almeriense de Níjar. Un particular fue quien avisó sobre lo ocurrido.

La madre del pequeño también tuvo que ser atendida por contusiones y lesiones leves. Los agentes de la Benemérita localizaron tras una compleja búsqueda al padre del pequeño. Fue detenido como presunto autor del homicidio pasando este lunes a disposición judicial.

No hay que olvidar que otro bebé de 17 meses murió el mes de enero en el País Vasco cuando presuntamente el compañero de su madre –a la que también al parecer maltrató- la arrojó por una ventana del domicilio.