Agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y la Fiscalía Anticorrupción registraron este miércoles la vivienda de Margarita García-Valdecasas, inspectora jefa de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF), dependiente del Ministerio de Hacienda. Al parecer, la investigación está centrada en los negocios de su marido, Alejandro Pérez Calzada, un conocido gestor de fondos, en el marco de la investigación de la lista Falciani.

La Audiencia Nacional sospecha que Pérez Calzada, podría haber estado blanqueando dinero a través de su sociedad Venture Finanzas Sociedad de Valores (que fue adquirida en 2010 por Mirabaud Finanzas Sociedad de Valores). Según recoge ABC, el procedimiento habría utilizado esta sociedad para ocultar fondos en Suiza, posteriormente trasladarlos a Andorra y, finalmente, introducirlos en España al margen de los cauces legales.

Aunque García-Valdecasas no es el objeto directo de la investigación, sí la compromete seriamente porque ella es la responsable final del control del fraude. ¿Acaso miró hacia otro lado con las actividades presuntamente delictivas de su marido? ¿O es que no se enteraba de nada, como Ana Mato?

Enfrentada a Ruz para proteger al PP

García-Valdecasas fue nombrada por Cristóbal Montoro. Es la persona que firma los informes que se entregan a la Fiscalía, lo que la ha dejado en evidencia a lo largo de la legislatura en varias ocasiones. Ejemplo de ello, su enfrentamiento al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz por el informe en el que debía calcular la cantidad que habría defraudado el PP al no declarar las donaciones ilegales recibidas en el año 2008, en el marco de los llamado 'papeles Bárcenas'. Argumentó que no tenía que hacerlo porque el PP estaba exento de ello. El magistrado se vio obligado a advertirla de las consecuencias penales si se empeñaba en seguir negando la información.

Finalmente los peritos respondieron con un informe en el que insistían en que Génova 13 estaba exenta de declarar las donaciones y que, en el caso de que lo hubiera hecho, la cantidad defraudada habría sido de 220.000. Su argumentario fue escandaloso al llegar a comparar al PP con Cáritas o Cruz Roja. Los tejemanejes del equipo de Montoro para proteger al PP llegaron al Congreso de los Diputados.

Detención de Rato

Ella fue también la que posibilitó la detención de Rodrigo Rato en el momento en que al Gobierno le interesaba. Posteriormente, se desvinculó del mismo y dijo que sólo lo había firmado en calidad de máxima responsable.

Margarita García-Valdecasas sustituyó a Sántiago Menéndez, su jefe, cuando fue nombrado máximo responsable de la Agencia Española de Administración Tributaria (AEAT). En línea con la política de Menéndez de todo queda en casa (su hermano Rogelio, asesor de Montoro, fue el que filtró el famoso informe de Cáritas a la prensa), nombró a su hermana Rosario inspectora jefa de la ONIF, en sustitución de la inspectora cesada por el caso CEMEX.

Su hermana Julia, ya fallecida, fue ministra de Administraciones Públicas con Aznar y delegada del Gobierno en Cataluña. Paradojas de la vida, Margarita fue novia de Artur Mas en el pasado.