Un año da para mucho o poco, según se mire, y en política ya se sabe que depende del ojo (ideológico) por el que se observe la realidad. Se cumplen los primeros 365 días de los gobiernos municipales y en uno, el más importante del país, hay quien parece que no acepta 12 meses después su nuevo rol. Madrid marca el paso a muchas de las cosas que ocurren en el resto de España, de ahí que la que en otros tiempos era la 'dueña y señora' de los designios de los madrileños continúe con la mosca detrás de la oreja.

Esto se traduce en que, cada vez que puede, tira a dar contra Manuela Carmena. Es Esperanza Aguirre en estado puro en un balance que le propone 'El Mundo'. Es evidente que no acepta esa realidad cotidiana, por lo menos en lo que a su posición en el Ayuntamiento se refiere. La 'lideresa', que llegó a la candidatura para frenar el avance de Podemos como ella misma ha reconocido en numerosas ocasiones, habla de su rival y su equipo con desdén.

Otorga un cuatro al Gobierno de la capital y pensando en las elecciones de junio habla del desempleo como el “problema más grave”. Obvia que las competencias son regionales o que la sangría afecta a todo el país para indicar que en la ciudad “ha crecido desde junio de 2015 hasta hoy. Y esto es una tragedia para muchísimas familias”. Una afirmación curiosa de quien decía que apenas llegaba a fin de mes cuando era presidenta regional.

Carmena es mala para la economía

Este sábado su adversario 'popular', es decir, el presidente en funciones, Mariano Rajoy, dedicaba buena parte de su discurso en el Círculo de Economía de Sitges a descalificar la labor económica de Manuela Carmena. Aguirre toma el guante y dice que lo peor de estos doce meses es “la parálisis" que sufren "los grandes proyectos”, con mención específica del proyecto de Wanda para el edificio España “que han tomado como si fuera la Catedral de Burgos, y en realidad es una muestra de la arquitectura del franquismo”. También menciona las operaciones de “Chamartín, Campamento, Calderón” sobre las que el Ayuntamiento “no tira ni para adelante ni para atrás”.

A la hora de hablar de lo mejor, nada de nada. Lo positivo para Esperanza Aguirre en este tiempo son las rectificaciones de algunos concejales como Rita Maestre o Guillermo Zapata “con sus tuits”. No olvida el caso de los titiriteros o la Memoria Histórica y ahí aplaude la “reprobación” de Celia Mayer.

Limpieza, tráfico, ideología...

Tras asegurar con rotundidad que “de hecho, el PSOE está gobernando ya en coalición con Ahora Madrid”, indica que los problemas que más preocupan en materia de política municipal son la “limpieza”, el “tráfico” y “el ser amigable con los emprendedores”. No es esta afirmación al azar puesto que la acompaña de otra de carácter ideológico: “Este odio a las empresas privadas que tienen estos señores es absolutamente lamentable”.

A modo de conclusión y comparando a Carmena con la considerada peor regidora de la historia, Ana Botella, Esperanza Aguirre subraya que mientras ésta “buscaba mejorar la ciudad” bajo el ideal liberal conservador, la actual alcaldesa lo hace “aplicando las fórmulas del populismo de izquierdas”. En definitiva, a la propia Carmena y a su equipo les sobra “prepotencia, mentira y a algunos el odio”. La lideresa en estado puro. Sin comentarios.