La campaña de polarización de la sociedad española de cara a las elecciones ha vivido un nuevo capítulo este miércoles, gracias a la estrategia que el Partido Popular ha puesto en marcha con motivo de los debates electorales.

Los populares han dado un giro de 180 grados respecto a la anterior campaña electoral, cuando se negaron a dar importancia a los debates a cuatro y Mariano Rajoy sólo se dignó a enfrentarse dialécticamente a Pedro Sánchez, con la excusa de que sólo debatiría con el líder de la oposición.

Fuentes socialistas aseguran que el PSOE siempre ha defendido ambas opciones, tanto la celebración de un nuevo debate a cuatro como un cara a cara de su candidato con el presidente del Gobierno en funciones. “Nosotros defendemos los dos formatos, el de 4 y el de 2. El argumento siempre ha sido el mismo: lo que pidan los medios”.

Curiosamente, el anuncio del PP de que sólo irán a un debate a cuatro ha coincidido con la propuesta de celebrar algún cara a cara. Hasta ahora, sólo había encima de la mesa proposiciones mediáticas para celebrar debates a cuatro. Sin embargo, según ha podido saber ELPLURAL.COM, el cambio de rumbo del PP ha llegado cuando Antena 3 y la cadena SER han ofrecido sus medios para celebrar una contienda a dos.

“Nosotros no hemos cambiado”, señalan las fuentes socialistas, “han aparecido nuevas peticiones. Siempre dijimos que atendíamos las peticiones de medios. Pero antes sólo había propuestas a cuatro y ahora también a dos”.

En la anterior campaña electoral, la estrategia del PP pasaba por no dar aire a los nuevos partidos, ante el riesgo de que les pudieran robar votos, sobre todo desde Ciudadanos. Sin embargo, la nueva campaña que están haciendo desde Génova busca polarizar a la sociedad, presentando el mensaje de que son ellos o “los extremistas”, como quedó claro en su último vídeo de campaña.

Desde ese punto de vista, a Rajoy ahora sí le conviene aparecer luchando a capa y espada contra el resto de esos candidatos “extremistas”. Mucho más que acceder a un cara a cara con Sánchez. Y no por aquello de que “hay que prepararlos” y sea algo que “no apetece”, según el propio, sino porque podría dar aire al PSOE y demostrar que existen otras opciones más allá de la batalla bipolar que presenta el PP.

Lo ha dejado muy claro y con mucho sarcasmo el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, cuando ha dudado incluso de que en un debate a dos tuviera que estar Pedro Sánchez, señalando que habría que ver cuáles son "esas dos fuerzas que las encuestas reflejan con mayor importancia de cara a los próximos comicios", ha señalado, apelando al supuesto sorpasso de Unidos Podemos al PSOE, con la conclusión: "No es nuestra apuesta". Para esta campaña, le ha faltado añadir.