Parece que los nuevos tiempos de los que presume el Ayuntamiento de Madrid tras la llegada a la alcaldía de Manuela Carmena, conllevan cierta discrepancia interna que, aunque se ha visto en varias ocasiones en lo que va de legislatura, en estos momento podría estar en su momento más álgido.

Dicen los expertos en política que las formaciones nacidas del encuentro de diferentes partidos con el elemento común de la ideología (en el porcentaje que corresponda), suelen acabar en desencuentro. Este, cuando surgen las discrepancias, tiene su reflejo en polémicas privadas y públicas y amenazas de abandono que pueden llegar a poner en entredicho todo el conglomerado.

Sin llegar a decir que esto sucede, o está en ciernes, en el Consistorio de la capital, este sábado el diario 'El Mundo' vuelve a poner sobre la mesa el desencuentro interno en el Gobierno que dirige Carmena.

Varios casos

Uno de esos supuestos tiene que ver con una de sus medidas estrella, la relativa a dar facilidades a personas en situación económica precaria que resultasen adjudicatarios de pisos de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo. Aunque podría parecer que la cosa estaba clara, este asunto se paralizó a finales de abril y “por sorpresa”, como indica el periódico.

Recuerda que en aquel momento la portavoz municipal, Rita Maestre, argumentó que había “muchas sensibilidades y percepciones distintas”. Sobran los comentarios.

Señala 'El Mundo' que este desencuentro es un ejemplo más de la complicada cohabitación en el seno de Ahora Madrid. Esto se debe a que detrás de la marca que accedió a la alcaldía están Podemos, Ganemos, Equo, IU y colectivos ciudadanos, además de independientes tal y como se definió la propia alcaldesa, Manuela Carmena. Es decir, una amalgama de formaciones con opiniones similares en algunas cosas, pero muy distantes en otras.

Cita el medio como otro ejemplo de esas 'distintas sensibilidades' el asunto de “un plan urbanístico en Chamberí”, del que ya informó ELPLURAL.COM, que se saldó con el voto en contra de 6 concejales de Ahora Madrid y Ganemos, mientras el resto dio su apoyo. Sobre este asunto rememora lo que dijo Maestre: “Estamos orgullosos de ser gente plural”.

Titiriteros

Desde que en verano de 2015 alcanzó el bastón de mando, Manuela Carmena ha tenido que hacer de bombera en más de una ocasión para apagar incendios internos. Muy conocido fue el caso de los titiriteros. Al margen del error reconocido en la programación por el tema de la edad, los episodios que siguieron a la entrada en prisión de los artistas volvieron a evidenciar las discrepancias. En aquel instante Ganemos, en un comunicado, criticó y no de manera leve, la gestión municipal de aquella crisis admitiendo los muchos “errores” cometidos y “la tibieza y poca valentía” a la hora de defender a los titiriteros.

Informa el medio que dirige David Jiménez de que en Ganemos existe la convicción de que Podemos hace todo lo posible para impedir que Ahora Madrid tenga una evolución, con más estructura organizativa, poniendo como paradigma la Mesa de Coordinación, el máximo órgano de dirección de Ahora Madrid, que según fuentes citadas por el periódico, “Podemos está abandonando a su suerte”.

Muchos observan lo que sucede en Madrid como un reflejo de lo que ocurre en otros territorios de España. Ahora, con el acuerdo para lanza Unidos Podemos hay quien se pregunta si el deseo de sorpasso y/o cambio superará cualquier discrepancia interna por muy grave que esta sea.