Este martes se ha presentado en Madrid ‘Adiós, Chueca’, libro póstumo del activista Shangay Lily. En la obra -calificada por la editorial Akal como “un texto contundente, radical y políticamente incorrecto”-, Shangay Lily lamenta que Chueca se haya “transformando en un gran centro comercial, desapareciendo aquel barrio alternativo, agradable y seguro de los años 80”.

Escrito poco antes de que el 12 de abril un cáncer acabase con su vida, el ‘drag queen’ incide de este modo en lo que en su día ya calificó como ‘gaycapitalismo’, un capitalismo “más fashion, más moderno y actual” en el que  a su entender, “un grupo de empresarios monopolizaron toda la pluralidad y diversidad que contenía el movimiento gay”.  

“La conversión de lo gay”
“En los noventa comenzó́ un proceso que a principios del nuevo milenio se blindaría: la conversión de los gay en una rentable marca que manejar, con férreo monopolio, por un grupo de empresarios que ignoraron los aspectos más polémicos de nuestra cultura, nuestra idiosincrasia, nuestra realidad, para centrarse en los más aceptables, folclóricos, vendibles. Y ese proceso empezó́ en mi entorno, alrededor de mí y sobre mí”, afirma Shangay Lily en ‘Adiós, Chueca’. 

En este sentido, el activista acusa a “una oscura elite de ‘gaympresarios’, políticos y supuestos activistas” de iniciar un “endiablado entramado de pactos y alianzas con el  fin de blindar el poder” y repartirse, “al modo de un verdadero microestado”, cada aspecto del fenómeno gay”.

Duras acusaciones
“Inventaron una suerte de ministerios que controlaban milimétricamente cada movimiento que tuviese lugar dentro de sus respectivos ámbitos. Este se quedó con “la noche gay” (Pedro Serrano), aquel con los “medios de comunicación gays” (Alfonso Llorpart), el otro con “la política gay” (Pedro Zerolo), el de más allá́ con “la hostelería gay” (Kike Sarasola)... Y en la actualidad siguen controlando con férrea disciplina sus correspondientes ministerios”, incide Shangay Lily. 

Según el activista, este proceso “fue extremadamente ágil pero también enrevesadamente complejo”. De hecho, lo resume en tres “rápidas” fases: pactos y alianzas, monopolio y pensamiento único, y boicot y represión de las disidencias”.

Sin respaldo del colectivo LGTBI
Presentado este martes en Madrid, ‘Adiós, Chueca’ no ha contado con el respaldo del colectivo LGTBI. Tanto es así que en el acto no estaban presentes ninguno de los activistas más reconocidos en la lucha por la igualdad -a excepción de la política de Izquierda Unida Eva Abril-. Sí que acudieron el actor Guillermo Toledo, el periodista Anival Malvar y el editorialista Jesús Espino.