[[{"type":"media","view_mode":"media_large","fid":"41188","attributes":{"class":"media-image size-full wp-image-351964","typeof":"foaf:Image","style":"","width":"645","height":"370","alt":"El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (i), y el secretario general del PSOE, Pedro S\u00e1nchez (d) - EFE\/Presidencia del Gobierno"}}]] El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez - EFE-Archivo/Presidencia del Gobierno



A pesar de que Mariano Rajoy declinó la opción de iniciar contactos con el resto de fuerzas parlamentarias para que apoyasen su investidura, desde que Pedro Sánchez recogió el testigo no dejan de arremeter contra él. Le acusan de no querer reunirse con su líder e insisten en que no apoyarán de ninguna manera un Gobierno presidido por el socialista, con lo cual no se sabe muy bien de qué quieren hablar.

 

Rajoy, muy debilitado de cara a la cita
En cualquier caso, esa cita que tanto ansían los populares aunque sea para visibilizar su distancia con Sánchez se producirá esta semana a partir del miércoles, ya que todavía no hay fecha cerrada. El problema para Rajoy y su partido es que el encuentro llega en una semana horribilis para Génova 13 en la que estarán presentes sus principales problemas con la corrupción, y eso que son numerosos. Una realidad que limita considerablemente el margen de Rajoy para presentarse como un líder creíble precisamente en una semana tan importante para las negociaciones de cara a la formación de Gobierno, proceso en el que él está empeñado en poner palos en las ruedas.

El macro-juicio por la Gürtel vuelve a escena
La semana ya ha empezado caliente para el PP con el anuncio de que el juicio oral de la Gürtel será en octubre, con lo que se cumple así el deseo del partido de que se dilate el proceso y no haya sentencia al menos hasta 2018. Pero a cambio tendrá que escuchar estos días el recordatorio de que el proceso cuenta con treinta y dos imputados, participes lucrativos y responsables civiles así como más de 400 testigos en el proceso de la mayor trama de corrupción de la democracia. Y es que por los juzgados desfilarán exdirigentes de peso del partido como Ana Mato, Pablo Crespo o Ricardo Galeote, así como los 'mediadores' que hicieron negocio gracias a la formación, desde de nuevo Crespo -que estuvo en ambos lados de la barrera- hasta el que ha dado nombre a la trama, Rafael Correa.

Cargos actuales también salpicados
Pero se trata solo del principio. Este viernes 12 de febrero alguien que mantiene su cargo, el consejero de Medio Ambiente de Madrid y hombre fuerte de Cristina Cifuentes, Jaime González Taboada, acudirá a declarar como testigo en la Audiencia Nacional también en el marco de la investigación sobre la trama Gürtel. La Asociación de Abogados Demócratas por Europa (ADADE), la principal acusación popular de este caso, considera que el consejero habría presionado para que se rebajara en beneficio de la trama una parcela de Boadilla del Monte.

Presunto encubrimiento por el borrado de los ordenadores de Bárcenas
La pesadilla en los juzgados del PP no acaba aquí y continúa con su principal dolor de cabeza, su extesorero Luis Bárcenas, además con dos cuestiones diferentes que ensombrecen por completo el cacareado compromiso del PP contra la corrupción. La jueza de Instrucción número 32 de Madrid ha citado a declarar también este viernes en calidad de investigado al representante procesal del Partido Popular (PP) en el marco de la causa que tramita por el supuesto borrado de los ordenadores usados por Bárcenas. Ese representante, aunque todavía no está claro quién acudirá, será interrogado sobre unos supuestos delitos de daños informáticos y encubrimiento. El mismo día, declarará después, también en calidad de investigado y por los mismos supuestos delitos, el abogado del PP Alberto Durán. La magistrada tomó esa decisión tras tomar declaración como investigados a la tesorera del PP, Carmen Navarro, y al exresponsable de informática del partido Javier Barrero. En su declaración Navarro también tuvo que intentar justificar el famoso despido "en diferido" de Bárcenas del que habló Cospedal.

Altos cargos baleares, incluido Matas
Pero más tentáculos de la corrupción en el PP se diseccionarán en los tribunales esta semana, y es que este martes la Audiencia de Palma retoma el juicio por el caso Nóos, que aunque mediáticamente pone el foco en la infanta Cristina y su marido Iñaki Urdangarin, cuenta con varios procesados populares. De hecho el primero en declarar este martes será "Pepote" Ballester, exdirector general de Deportes del Govern balear entre 2003 y 2007 y que ha reconocido su participación en la trama, y después de él desfilarán otros exaltos cargos populares como el exdirector del Instituto Balear de Turismo (Ibatur) Juan Carlos Alía o el propio expresidente Jaume Matas, quien pagó 2,5 millones a la plataforma de Urdangarin.

De postre, la Púnica
No acaba ahí el bochorno para Rajoy, y es que el juez Eloy Velasco acaba de comunicar a las partes presentes en el caso Púnica la apertura parcial de de las diligencias practicadas por la Policía durante la investigación de la trama, según ha podido saber ELPLURAL.COM. En próximas fechas se conocerán así pormenores de las investigaciones practicadas a los Granados y compañía, peticiones de expedientes de contratos amañados, informes tributarios y comisiones rogatorias a Suiza sobre cuentas opacas y el detalle de las declaraciones ante el juez de decenas de testigos.