Albert Rivera y Mariano Rajoy.



Después de que Mariano Rajoy “declinara” por el momento ser el candidato para la investidura, todo ha vuelto a empezar. Este miércoles han arrancado una segunda ronda de contactos de los portavoces parlamentario con el rey ¿y esto qué significa? Pues que el reloj sigue corriendo y se consumen los minutos para conseguir pactos.

Ya lo dejó claro Rajoy el pasado viernes: "Hoy no tengo los votos y no tiene sentido que vaya allí para que empiece a correr el plazo", en relación a presentarse en el Congreso de los Diputados para el debate de investidura.  Pero en menos de una semana, en cinco días exactamente, han pasado muchas cosas. Ha destacar, la ‘operación Imelsa’ que ha acabado con la detención de figuras fuertes del seno del PP de Valencia. Concretamente fueron detenidas 24 personas, entre ellas el exlíder del PP provincial Alfonso Rus.

Aun así, Rajoy sigue en ‘sus trece’ y asegura que "lo ocurrido ayer no tiene por qué dificultar las negociaciones. Se ha demostrado que no hay impunidad, el PP ha sido implacable", aunque sus posibles socios no creen lo mismo.

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha asegurado que es "muy difícil" que Rajoy pueda abanderar un pacto contra la corrupción política, una de las prioridades de Ciudadanos para pactar con cualquier partido. Asegura que si "no ha sabido controlar la de su partido" cómo va a luchar contra la corrupción. Así se ha expresado Rivera en el Congreso, donde este miércoles reunirá a su grupo para tratar todos los temas relacionados con su estrategia y organización parlamentaria.

La lucha contra la corrupción es una de las propuestas que Ciudadanos pondrá sobre la mesa de cualquier negociación para conformar el futuro Ejecutivo, unas negociaciones que no empezarán hasta que termine la segunda ronda de contactos que el Rey está llevando con los partidos desde hoy.