La vicepresidenta primera del Congreso, Celia Villalobos, ha admitido este miércoles que su comentario sobre las rastas del diputado de Podemos, Alberto Rodríguez, fue una “broma estúpida e innecesaria” que no debería haber dicho y que no volverá a decir.

Así se ha disculpado Villalobos en una entrevista en RNE sobre el comentario que hizo cuando señaló que no le importa que los diputados lleven rastas siempre que estén limpias y no le peguen piojos, a la vez que ha lamentado que las cosas que ella dice siempre “se magnifican mucho”.

El hecho de que haya un diputado con rastas no significa otra cosa más que “hay un montón de gente que lleva rastas”, ha dicho Villalobos, a quien le parece “tan normal”. Y ha lamentado que aquel comentario, que era solo una “broma”, se haya convertido para ella en "un problema".

Cernuda, en sus trece
Todo lo contrario ha hecho la periodista Pilar Cernuda, que se ha reafirmado en sus declaraciones que hizo la semana pasada en el programa Espejo Público. La tertuliana puso el foco sobre la higiene de los nuevos diputados de Podemos que llegaban por primera vez al Congreso.



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Lejos de disculparse, Cernuda se ha mantenido en sus trece cargando contra “la frivolidad de este país o de la gente de las redes sociales que se lo han pasado bárbaro poniéndome a parir. Como no estoy en las redes sociales, no lo he leído; pero sé que me han puesto a parir… y alguna colega de la radio también”. La tertuliana ha criticado que ella puso el foco sobre las cuentas o las propuestas y lo que ha quedado han sido sus comentarios sobre la limpieza que iban dirigidos a todos los diputados, no solo a los de podemos.

Pilar Cernuda la semana pasada, ante la cara de incredulidad de la presentadora Susana Griso, llegó a asegurar que “hace falta limpieza; que la progresía no está reñida con el baño, con la ducha. Que no está reñida”.