Martes negro y caótico para Concepción Espejel, los magistrados de su sección, fiscal, funcionarios, testigos, acusados y público el que se vivió este 3 de noviembre en la Audiencia Nacional ante la imposibilidad de celebrar un  juicio por mal diseño de la sala de vistas y un desgraciado sistema de grabación. Todos pudieron comprobar que la flamante reforma del edificio que ha costado 27 millones de euros a todos los españoles, avanza hacia el desastre que ya habían denunciado los funcionarios ante el titular de Justicia el día de la inauguración. Y eso que el ministro Catalá expresó su opinión categórica de que esta nueva sede “es un ejemplo del trabajo del Gobierno, modernidad y transparencia”.

El lunes 2 de noviembre a las 10:00 horas la presidenta de la Sección II de la Audiencia Nacional, Concepción Espejel, daba inicio en la sala de vistas al juicio por estragos terroristas  causados por un artefacto explosivo en la oficina del INEM de Bilbao el 29 de enero de 2006. Un juicio que ya ese día tuvo problemas, unos problemas que el martes hicieron imposible continuar.

Íñigo Zapiran, Beatriz Etxebarria y Saioa Sánchez, acusados por el atentado cometido en 2006 contra una oficina del INEM de Bilbao durante la primera sesión del juicio contra ellos en la Audiencia Nacional. EFE



Acusados a la espera
Allí esperaban los acusados Iñigo Zapirain Romano, Beatriz Etxebarria Caballero y  Saioa Sánchez Iturregui condenados en su día por asesinato en otra causa a más de 500 años de cárcel, se enfrentaban ahora a la acusación de la Fiscalía de haber causado heridas a un ertzaintza y daños valorados en más de 93.000 euros.

Viaje a Madrid para testificar… por videoconferencia
El lunes empezaron las dificultades. El instructor y el secretario del atestado tuvieron que desplazarse a Madrid para comparecer ya que no se les permitió hacerlo por videoconferencia. Pero en la sala que ocupaban el sistema de sonido hacía sus palabras ininteligibles. La solución fue declarasen allí mismo en la Audiencia, desde otra sala…¡por videoconferencia!

No se podía escuchar a los testigos
Ya el martes se vio que era definitivamente era imposible grabar la voz en los habitáculos de los testigos protegidos. Al parecer el problema venía dado porque están construidos con un material que produce una reverberación del sonido. Imposible escucharles.

Espejel regañando al público
Fue preciso además colocar una pantalla de proyección entre el público y los testigos. El público quería ver y se asomaba por los bordes. Esto motivó que la presidenta de la Sala tuviera que regañar en diferentes ocasiones a los ciudadanos interesados en averiguar lo que pasaba. “¡No asome usted la cabeza!”, se enfadaba la magistrada Concepción Espejel. “¡Que le digo que no la asome!”

Fidelius fallando miserablemente
Para acabarlo de arreglar, el sistema Fidelius de grabación que no ha dejado de dar problemas en otros juzgados desde el año 2011 en que se procedió a su instalación en las salas de vistas, volvió a hacer de las suyas en este juicio: Testigos y peritos que hablaban por videoconferencia no quedaron grabados en el registro. Fidelius demostró ser un sistema inapropiado para la sala de vistas de la nueva maravillosa Audiencia Nacional.

Mañana judicial perdida
Lo intentaron todo: pruebas, ajustes, comprobaciones… con el resultado de toda una mañana judicial perdida… y la continuación de las vistas en otra sede, en San Fernando de Henares, con el consiguiente retraso en desplazamientos de funcionarios, y presos. Salas mal diseñadas y sistemas que no funcionan entorpecen la labor de la justicia, que bastante tiene con la tradicional falta de medios que padece.

Además de los problemas previos
Estos problemas vienen a sumarse a los ya denunciados por los funcionarios el día en que el ministro Rafael Catalá inauguró la nueva Audiencia a bombo y platillo: "Los compañeros están trabajando en unas condiciones infrahumanas, el servicio de guardia es un colapso auténtico, no tiene conexión con los calabozos, no hay cobertura en el juzgado de guardia para poderse comunicar con los calabozos”, enumeraban los funcionarios.

Sin contar con los usuarios
Dicen en la Audiencia que el problema es que la rehabilitación  del  arquitecto Francisco Rodríguez, alabada también por el titular del ramo, Rafael Catalá “se ha hecho sin contar con las necesidades de los usuarios. No han consultado.  Y no responde a lo que se precisa para un funcionamiento eficaz”.

La Gurtel se retrasará aún más
Lo más grave es que esta reforma de la Audiencia Nacional y todos los problemas que van apareciendo y que retrasan los procesos,  hacen temer lo peor en las causas por venir. Este digital anunciaba días atrás que el juicio del caso Gurtel no se vería previsiblemente hasta bien entrado el 2016. Fuentes jurídicas comentaban hoy a ELPLURAL.COM que con estas calamidades de diseño añadidas: “Si  Gurtel empieza en el 2017, nos podemos dar con un canto en los dientes”.