Alex Salinas, joven transexual vetado por el Obispado de Cádiz para ser padrino del bautizo de su sobrino. EFE



El obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zorzona, tras negarle inicialmente a un joven transexual la posibilidad de ser padrino en el bautizo de su sobrina, rectificó y finalmente accedió a que Alex Salinas ejerciera esa responsabilidad. La sorpresa surge ahora cuando el propio obispo ha dado marcha atrás a la segunda decisión adoptada y niega de nuevo la posibilidad de que el transexual de San Fernando sea padrino.

Presiones de colectivos provocaron que se levantara el veto
Las presiones de colectivos, la polémica surgida en los medios y la advertencia de la Asociación de Transexuales de Andalucía (ATA) de su voluntad de poner en conocimiento de la Fiscalía de igualdad y contra los delitos de odio esta decisión, hicieron que el obispo rectificase. Ahora de nuevo la situación vuelve a sus orígenes y la Iglesia niega lo que Alex Salinas cree un derecho como creyente católico que es y practicante que ejerce su religión.

No posee el requisito de llevar una vida conforme a la fe
Se ampara en que tras consulta formal realizada ante la Congregación para la Doctrina de la Fe, existe "imposibilidad" de que se admita a Alex Salinas. Subraya además que "teniendo en cuenta la relevancia mediática alcanzada por este asunto" y "las posibles consecuencias pastorales de cualquier decisión" decidió elevar una consulta en que se recoge que "resulta evidente" que un transexual "no posee el requisito de llevar una vida conforme a la fe y al cargo de padrino", por lo que no puede ser admitido en dicho cargo. "El mismo comportamiento transexual revela de manera pública una actitud opuesta a la exigencia moral de resolver el propio problema de identidad sexual según la verdad del propio sexo", recoge el escrito.

No es discriminatorio
También sostiene que la Congregación "no ve en ello una discriminación, sino solamente el reconocimiento de una objetiva falta de los requisitos que por su naturaleza son necesarios para asumir la responsabilidad eclesial de ser padrino". El Obispado de Cádiz y Ceuta ya negó a Salinas, el pasado mes de julio, la posibilidad de ejercer de padrino de su sobrina tras acudir a una parroquia de su San Fernando natal para organizar la celebración de este sacramento aunque, tras la presión mediática y social, el joven recibió la autorización que ahora la Iglesia gaditana vuelve a negarle.

Muy indignado
El joven, de 21 años, ha manifestado que hoy mismo, cuando iba a acudir a la parroquia para elegir fecha, el obispo le ha llamado y le ha comunicado que "Roma le había dicho que no podía ser" padrino de bautismo. Por ello, asegura, se siente "bastante indignado".

Contrario a la naturaleza del hombre
El obispo, por su parte, sostiene que "la Iglesia acoge a todas las personas con caridad queriendo ayudar a cada uno en su situación con entrañas de misericordia, pero sin negar la verdad que predica, que a todos propone como un camino de fe para ser libremente acogida". De hecho afirma que "el Papa Francisco ha afirmado en varias ocasiones, en continuidad con el Magisterio de la Iglesia, que esta conducta es contraria a la naturaleza del hombre" y que "no es sana una actitud que pretenda cancelar la diferencia sexual porque ya no sabe confrontarse con la misma". Cree además que "algunos fieles le han atribuido palabras que él no ha pronunciado".