Los guardias civiles, como la oposición política, han encajado mal las explicaciones dadas por Jorge Fernández Díaz sobre su reunión con Rodrigo Rato, imputado en el caso Bankia e investigado por blanqueo, en su despacho del Ministerio del Interior. La Asociación Unificada de Guardias Civil (AUGC) ha salido al paso de la justificación alegada por el ministro, de "amenazas" contra Rato y su entorno familiar, al afirmar que "no hay constancia" de denuncias al respecto.

Desconcierto
La AUGC, que ha manifestado su "desconcierto" por la comparecencia de Fernánde Díaz, ha dicho que el ministro usa "diferente rasero para medir las amenazas recibidas por dos ciudadanos españoles". En un comunicado, divulgado por Europa Press, la organización se refiere a las amenazas que sufre un guardia civil que, según afirma, contribuyó a "desarticular una banda criminal" y que no ha obtenido atención por el Ministerio.

El doble rasero de Fernández Díaz
La asociación de guardias civiles explica que Rato  no ha presentado "denuncia alguna por sentirse intimidado", y, en cambio,  sí hay pruebas de que el agente "ha sufrido amenazas graves y serias", que ha comunicado a la cadena de mandos de la Guardia Civil, sin que hayan sido atendidas.

La AUGC insiste en su exigencia de dimisión por parte de Fernández Díaz, ya que -afirma-  "una vez más se produce una muestra de la falta de atención hacía los graves problemas internos que sufren los guardias civiles".