Vista de uno de los carteles que anunciaba la desaparición en Cuenca de dos amigas mayores de edad, Marina Okarynska y Laura del Hoyo Chamón y del principal sospechoso, Sergio Morante Garces, desde el 5 de agosto de 2015. EFE



Este miércoles, un ciudadano encontró los dos cuerpos sin vida de las jóvenes desaparecidas en Cuenca. Se encontraban tirados boca bajo en una orilla del río Huécar, a unos tres kilómetros de la localidad de Palomera, cercana a la capital conquense. Tras dar el aviso a la policía, rápidamente se confirmó la trágica noticia tras una semana de búsqueda.

Hasta la zona se desplazaron diversos efectivos de la Policía Nacional que mantuvieron acordonado el lugar hasta que se procedió al levantamiento de los cadáveres por parte de las autoridades judiciales.

A la espera de que se realice la autopsia este jueves, los cadáveres hallados presentaban signos de quemaduras y restos de cal, por lo que todo hace pensar que el autor o autores de sus muertes podrían haber intentado quemarlas, según señalaron a Efe fuentes de la investigación.

Una semana desaparecidas
Laura del Hoyo Chamón y Marina Okarynska, de 26 y 24 años respectivamente, desaparecieron el pasado 5 de agosto y la última pista que se tenía era el coche propiedad de una de las jóvenes aparcado cerca de la casa del exnovio de una de ellas, llamado Sergio Morate.

La Policía había registrado este mismo miércoles en la localidad donde han sido encontrados los cuerpos una casa propiedad de la familia del joven, que aún se encuentra en paradero desconocido. También una finca de otra localidad cercana a Cuenca en la que la familia del joven tiene almacenes relacionados con la venta de muebles antiguos.

En el extranjero
Según recoge El País, la búsqueda de Morante se ha extendido hasta fuera de España ya que el joven comentó a sus allegados antes de desaparecer que quería irse a un país que no tuviera convenio de extradición con España. Además, los agentes creen que el hombre podría haber huido con un coche perteneciente a su familia.

Ante la vivienda familiar de Laura y a lo largo de la noche muchas personas han llevado velas a un altar improvisado. EFE



Colaboración ciudadana
Desde un primer momento, las familias de Marina y Laura insistieron en que no se trataba de una desaparición voluntaria, y organizaron búsquedas para dar con su paradero.

Cuenca también ha estado conmocionada desde entonces, y de hecho, este miércoles por la tarde unas 4.500 personas participaron en una concentración convocada por las familias, que agradecían la solidaridad de los conquenses y pedían ayuda en la búsqueda. Dos grandes pancartas acompañaban con las leyendas: “Marina, Laura, estamos con vosotras”, y “Cuenta entera, con vosotras. Os vamos a encontrar”.

Tras conocerse el fallecimiento de las chicas, el Ayuntamiento de la ciudad ha decretado tres días de luto oficial y se ha guardado un minuto de silencio a 11.00 horas de este jueves para mostrar su apoyo a los familiares.