Nada sucede de la noche a la mañana, tampoco la llegada de la septuagenaria Manuela Carmena a Ahora Madrid, la candidatura planeada por Podemos para "asaltar el cielo" de la capital. La jueza, jubilada desde 2010 y dueña de una tienda solidaria en Malasaña dio calabaza a los de Pablo Iglesias hasta en siete ocasiones, en medio de una operación para convencerla que los podemitas llamaban entre ellos “One Girl”.

Air Force One y la jueza
El secretario general de Podemos en Madrid, Jesús Montero, es el máximo responsable de la idea, ya que fue a él a quien se le ocurrió que Manuela pudiera vencer a Aguirre. En un extenso reportaje, de este domingo, en El Mundo, Montero explica por qué lo del nombre de One Girl. “Por las resonancias del avión Air Force One del presidente de EEUU. Me imaginaba a nuestra candidata como un gran avión con poder al que teníamos que llevar en volandas hasta el palacio de Cibeles".

El último domingo de mayo de 2014
A Montero, funcionario de la Complutense, se le ocurrió la idea de la candidatura de Manuela Carmena después del éxito de las europeas de su formación. Estaba en su casa, en el último domingo de mayo de 2014 cuando vio a la jueza en la televisión, después de muchos años. Esa misma noche se propuso que aquella mujer que le había enamorado en su juventud en los años 80 fuera la candidata a la Alcaldía de la capital y empezó la operación One Girl.

"Me impactó de ella su optimismo, siempre acaba con una sonrisa. También su imagen de sufragista republicana del siglo XIX. Aunque nunca llegamos a tener relación de amistad, y durante años no tuvimos ningún contacto", narra Montero.

Montero contó a sus compañeros de Podemos su propuesta
Manuela era todo un símbolo para esa generación de jóvenes comunistas. Había ingresado en las filas del PCE en 1965 y fundó en el 72 el despacho de abogados laboralistas de la calle Atocha de Madrid. Allí fueron asesinados el 24 de enero de 1977 cuatro de sus compañeros y un sindicalista”.

A mediados de julio, Montero se citó con varios compañeros de Podemos en una terraza de los campos de rugby de la Ciudad Universitaria de Madrid. Monedero habla de su pretensión de ser candidato para la Alcaldía de Madrid, pero Montero lanza su idea de Manuela Carmena. Su propuesta causa sorpresa entre los demás, que apuestan por la candidatura del exministro Federico Mayor Zaragoza por ser más conocido.

Una jueza frente a la corrupción de Aguirre
“Les dije que sólo hacía falta poner a Carmena en cuatro tertulias en la televisión para darla a conocer". Los argumentos de Montero, sociólogo y exmilitante de IU, fueron éstos: frente "a la corrupción" de Aguirre, una jueza, y, además, debía ser mayor, porque Podemos había detectado que tenía problemas para convencer al electorado femenino de personas mayores.

Además, “una abuela siempre es respetada por sus nietos, los votantes jóvenes”. En tercer lugar, Carmena “es una referencia para el votante socialista".

La técnica de los monjes shaolin
Pasados unos meses, Montero intenta convencer a Iglesias, que, en principio, se resistió porque, en su opinión, “la batalla con Esperanza Aguirre iba a ser en el barro” y Manuela era una persona de humanidad, que no parecía estar preparada para esa guerra”.

Montero había pensado en todo: “Le respondí que necesitábamos hacer como los monjes shaolin, aprovechar la fuerza perversa de Aguirre para que se cayera, ponernos de lado para que se estrellase en el barro. Vencer sin luchar, como Sun Tzu en El arte de la guerra. Y ese papel lo podía hacer Manuela”. Justo como ha sido, nadie encumbró más a Carmena que la propia Aguirre con sus ataques a la jueza durante la campaña.

La primera cita en el Círculo de Bellas Artes
En febrero pasado, Montero consigue cerrar una cita con Manuela Carmena a través de una amiga en común, Rosa Arteaga, exjueza de la Audiencia Nacional, en la cafetería del Círculo de Bellas Artes de Madrid.

La jueza le dijo que no y le contró que la editora de su libro autobiográfico “Por qué las cosas pueden ser diferentes”, ya la había animado a hacerlo y también su hijo. Este último dato fue determinante, porque a partir de entonces Montero buscó la complicidad del hijo de la jueza (Manuel) para su operación One Girl. Además, encontró el apoyo de otros íntimos de Carmena, entre ellos Marta Higares, oficial de los juzgados de Plaza de Castilla, la “única imposición en las listas” que hizo la jueza.

El encuentro con Iglesias
El último en jugar un papel en la operación fue Pablo Iglesias. "Tienen una conversación telefónica y quedan para que acuda a ser entrevistada en el programa Otra Vuelta de Tuerka. Era una excusa. El fin era convencerla". Fue el 6 de marzo, pero Carmena vuelve a rechazar la oferta de Podemos.

El documental sobre las mujeres afganas
Según cuenta Montero, la jueza se fue a Valencia y allí vio un documental: "La piedra de la paciencia", una película sobre la lucha de las mujeres afganas. Y allí empieza a medir las consecuencias de su negativa, tras conocer ya que Aguirre se presentaba por el PP.

¿La oferta sigue en pie?
Ya en Madrid, la noche del 9 de marzo Manuela Carmena estuvo reflexionando en la oferta de Podemos y a la mañana siguiente llamó a Montero: "Me dijo: 'Te llamo para saber si la oferta sigue en pie'. Por supuesto Manuela, le contesté”.