Hervé Falciani. EFE



Impecablemente vestido, derrochando cortesía, Hervé Falciani resaltó las dificultades para indagar en temas como la evasión de dinero, el blanqueo de capitales o el papel de los paraísos fiscales y del crimen organizado o el terrorismo:  “no se pueden imaginar la cantidad de filtraciones que llegan de un país como España que no se pueden utilizar por falta de voluntad política de las administraciones”, explicó este lunes en el Ateneo madrileño en la presentación de su libro La caja fuerte de los evasores.

Falciani relata en su libro como le contactaron  los servicios secretos y como llegó a  ventilar los ocultos manejos bancarios del suizo HBSC e hizo pública una lista de 130.000 evasores internacionales y de la conexión muchas veces del blanqueo de dinero y los paraísos fiscales con el crimen organizado, con el narcotráfico o el  con el terrorismo. Y lo termina con una relación de propuestas para luchar contra la evasión fiscal.

Un futuro diferente
“Imaginemos por ejemplo un futuro en que la Agencia Tributaria pueda intercambiar información con la Audiencia Nacional o con la Fiscalía Anticorrupción. Sería un éxito.  O en la posibilidad de elegir estrategias fiscales compartidas por todos los partidos: sería un cambio global útil para todos los países” –continuó- “Pensemos en  España, Grecia... en Europa con la  posibilidad de discutir políticas fiscales que puedan cambiar todo y no seamos siempre los mismos los que lo pasemos mal”.

Remunerar al informante
Abogó por medidas pragmáticas frente al fraude.  A este respecto, recordó que en otros países, como Norteamérica “un modo de proteger al denunciante es ofrecer dinero por esas informaciones de modo que el equipo que lleva a cabo la trampa, tiene miedo de ser denunciado”. También dijo que Estados Unidos “no tienen problema en preguntar a la persona que investigan de donde vienen los beneficios del dinero que tienen”.

El éxito de Norteamérica
Como resultado mencionó que Norteamérica ha obtenido en dos años más de doscientos mil millones de dólares en concepto de multas a bancos. “El tamaño de la multa hace mucho ´-aseveró- ¿Qué ha hecho Europa en ese mismo plazo de tiempo? Apenas ha logrado recaudar unos millones en concepto de sanciones”.

La UE protege a la banca frente a USA
Según el análisis de Falciani el consenso en esta materia en la UE es “para proteger a la Banca europea amenazada por América del Norte. Suiza representa el punto débil del sistema bancario europeo y los bancos europeos se ven en riesgo de ser sancionados. Pero pocos departamentos de justicia piden estas multas”.

Los clientes, testigos
 El camino es, considera, utilizar a los clientes no solo desde el punto de vista del fraude sino como testigos “Francia lo ha decidido ya así, y no solo en lo que se refiere a la banca francesa sino en la que está en Suiza o en Reino Unido. Igual que se piden millones a los clientes, se podrían pedir miles de millones a los bancos”.

Frente a la ineficacia... amnistía fiscal
¿Y en España qué se hace? “si el modo que deciden los políticos para recaudar tributos se demuestra ineficaz, lo resuelven con una amnistía fiscal”. Por ello a Falciani, le ilusiona el nuevo mapa político español recién salido de las elecciones municipales  y autonómicas porque aventura la posibilidad de unos pactos diferentes.

El poder para buscar soluciones
Unos pactos que lleven al frente de las instituciones “a aquellos que no quieren el poder en sí mismo, sino que lo desean para buscar soluciones. Los ciudadanos deben saber que  se pueden hacer muchas cosas y solucionar también las políticas fiscales”.

“Se ocultan tras testaferros”
No quiso hablar Falciani de ciudadanos  concretos cuando se le preguntó si Rodrigo Rato aparecía en su famosa lista de 130.000 nombres de evasores fiscales. Se refirió al modo de obtener privacidad por parte de estos presuntos delincuentes “los que buscan el modo de no ver su nombre en público lo ocultan a través de testaferros”.

La Agencia Tributaria sin recursos
De su experiencia con la Agencia Tributaria destacó que “la gente de dentro con la que estoy trabajando tiene mucha información pero carece de recursos y de la posibilidad de compartir esa información”. Para Falciani se trata de gente muy valiosa pero mermada en su capacidad de acción por estas circunstancias.

Las grandes empresas pueden sustentar el IVA
Se refirió también a soluciones abordadas por otras administraciones europeas como las de países del norte de Europa que realizan una suerte de ingeniería sobre el IVA “de modo que no está solo sustentado por los ciudadanos sino también por las grandes empresas”.

Un cambio político para cambiar las leyes
Concluyó Falciani respondiendo a la pregunta de qué ocurre hoy en el HSBC tras esta enorme denuncia que él ha protagonizado, recordando que son los seres humanos los que deciden y que por mucho que se presione sobre ellos, el cambio debe ir más lejos, cambiando las leyes. “Y las leyes no se han cambiado, siguen los mismos mecanismos, las mismas cosas...” De ahí su interés y ese sentimiento de esperanza con las nuevas situaciones políticas que sí considera pueden llevar a un cambio.