Juan Miguel Villar Mir, ex ministro franquista y marqués, lleva una mala racha y las sospechas sobre las prácticas de su empresa OHL para conseguir contratos fuera y dentro de España se agrandan. OHL aparece como donante de 300.000 euros al Partido Popular en los papeles de Bárcenas, en los que se registraban los donativos en dinero negro, y el propio marqués Villar-Mir ha tenido que declarar en la Audiencia Nacional ante el juez Ruz. En las últimas horas los problemas asedian a la filial de OHL en México, donde la autoridad bursátil suspendió su cotización después de que se desplomara al conocerse unas grabaciones y vídeos en los que trabajadores de OHL hablan de prácticas corruptas.

Desplome en México y en España
Las acciones de OHL México llegaron a desplomarse un 11,2% en la jornada de ayer, lo que provocó que este jueves OHL cayera un 7% en la bolsa de Madrid por las sospechas de prácticas corruptas, que consistirían en sobrecostes artificiales de las obras que irían a parar a bolsillos particulares, además del pago de vacaciones en hoteles de lujo a funcionarios mejicanos. Las grabaciones de las conversaciones circulan por internet.

Las grabaciones
En las grabaciones difundidas se escucha a los tres máximos directivos de OHL en México, Pablo Wallentin Crawford, Jesús Campos López y José Luis Muñoz hablar de un sobrecoste desmesurado en una obra que no tendría justificación técnica y que iría directamente a las cuentas de OHL. De esta forma una obra que iba a costar 4.000 millones de pesos pasa a costar 10.000 millones. Todo ello aderezado de términos futbolísticos como "estamos metiendo un gol".

OHL argumenta que las grabaciones son ilegales
La constructora de Villar-Mir ha remitido un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CMNV) en el que afirma que las "supuestas malas prácticas" que se atribuyen a sus ejecutivos "se basan en grabaciones obtenidas ilegalmente", pero no las desmiente con lo que quiere utilizar el mismo argumento con el que el PP desmontó el 'Caso Naseiro', que es el de la ilegalidad de la grabaciones y no de los que se escucha.
No obstante la constructora en México ha negado en un comunicado "la existencia de cualquier tipo de actuación irregular en sus relaciones con el Estado Mexicano" y asegura que su actividad en ese país "se ajusta estrictamente a la legalidad, a los contratos que tiene suscritos, y a las mejores prácticas corporativas". Sin embargo la constructora ha anunciado la apertura de una investigación interna para esclarecer los hechos y "adoptar las medidas que resulten oportunas".