El sistema de lucha contra el dopaje que intenta poner en marcha la Agencia Española para la Protección de la Salud en el Deporte, máximo organismo antidoping, puede quedar completamente paralizado en los próximos meses si no se resuelve de forma rápida el conflicto planteado por la resolución del contrato para la toma de muestras de sangre y orina a los deportistas.

El procedimiento para la toma de estas muestras es esencial para garantizar la limpieza de todo el sistema antidoping y es uno de los puntos flacos de España en la lucha contra el fraude en el deporte. La pugna por ese contrato está ya en los Tribunales de Justicia y esta circunstancia puede convertirse en un elemento de riesgo para la credibilidad de todo el sistema español antidoping, hasta el punto de paralizarlo, según expertos en salud deportiva.

Recurso de IDTM
La Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional ha admitido a trámite el recurso de la empresa sueca International Doping Test Management (IDTM) contra  la resolución del pasado mes de marzo de la Agencia Española para la Protección de la Salud en el Deporte (AEPSAD) que adjudicaba el contrato para la toma de muestras de sangre y orina a deportistas a la empresa alemana Professional Worldwide Control (PWC).

La Audiencia Nacional, clave
En los próximos días la Sala deberá decidir si suspende de forma cautelar la resolución de la AEPSAD que permite empezar a PWC a operar a partir del próximo 1 de julio, mientras se resuelve definitivamente el recurso de IDTM. Los expertos en salud deportiva consultados por este medio señalan que la resolución de la Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional es clave de cara a las futuras actuaciones que pueda desarrollar PWC en virtud de contrato que le ha adjudicado la AEPSAD. Si la adjudicación del contrato está sometida a disputa judicial, los resultados de las tomas de muestras de orina y sangre que tome PWC pueden ser cuestionados e incluso invalidados en cualquier causa antidoping.

Posibles anulaciones
En el caso de que un deportista haya sido señalado como posible positivo, el hecho de que la empresa o el especialista que haya tomado y gestionado sus muestras orgánicas tenga en duda su capacidad jurídica para operar, puede ser utilizado como un elemento exculpatoria que anularía cualquier actuación judicial, administrativa o deportiva contra él y quedaría, en la práctica, completamente indemne. Si existen dudas sobre la capacidad legal de PWC para actuar, sus decisiones pueden ser invalidadas en un futuro, reiteran esos expertos en salud deportiva

Irregularidades en la adjudicación
El recurso de IDTM contra la adjudicación a la alemana PWC se basa en una serie de irregularidades y arbitrariedades de las que se responsabiliza a la AEPSAD en el proceso de adjudicación del concurso, que han dado lugar a un largo camino de impugnaciones y resoluciones contradictorias que han prolongado durante más de un año la resolución de un concurso esencial para que el sistema antidoping español pueda ser mundialmente homologado.

Presiones de los Oficiales de Control de Dopaje
En el fondo de la cuestión están las fuertes presiones que ha ejercicio una buen aparte del actual colectivo de los Oficiales de Control de Dopaje, los agentes encargados de la toma de muestras de sangre y orina a los deportistas, que apuestan decididamente por la opción de PWC, la empresa que estaría más próxima a mantener su actual estatus operativo, frente a la propuesta de IDTM, que propone un cambio radical en el sistema para garantizar su total independencia y ajuste a las normas internacionales antidoping.