Fotografía facilitada por la Editorial Icaria de la escritora y periodista Margarita Rivière. EFE



Con más de una treintena de libros a sus espaldas, el pasado 25 de marzo la periodista y ensayista catalana Margarita Rivière presentó Clave K (Editorial Icaria),novela escrita 15 años atrás en que se ilustra la parábola de ascenso y caída de K, un exbanquero que, tras arrasar en unas elecciones autonómicas y convertirse en cabecilla del imaginario pueblo “kaiko”, asiste impotente a la desintegración de su carrera cuando un fiscal le acusa de expoliar el banco.

Pura coincidencia con la realidad
Se trata de una sátira sobre el poder, donde convergen iluminados políticos, codiciosos magnates y ambiciosos periodistas. Una novela en la que aunque cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia, al lector le resulta imposible no identificar al protagonista de la novela con Jordi Pujol.

Testamento periodístico y literario
Quizás por eso Clave K estuvo casi 15 años guardada en un cajón sin encontrar editor alguno que se atreviese a publicar esta obra que, cosas de la vida, se ha acabado convirtiendo en el testamento periodístico y literario de Rivière.

Dando la cara
Y es que este domingo, a los 70 años de edad, fallecía la periodista de la que todos sus colegas -además de su intachable carrera profesional-, ensalzaban por su talante progresista y su compromiso con iniciativas que no siempre fueron fáciles de defender, como demostró recientemente apoyando una España federal en un contexto en el que independentismo catalán se mostraba intratable.

Clave K
De ahí la relevancia, y aún más después de su fallecimiento, que adquiere Clave K. Una obra que Rivière tuvo serias dificultades para presentar debido a lo avanzado de su enfermedad. De hecho, en la presentación de su obra celebrada el pasado miércoles tuvo que intervenir a través de un mensaje grabado. Ya el viernes, Rivière solicitó su ingreso en una clínica de cuidados paliativos donde agotó sus últimas horas de vida. 

Tesón e ironía
Sin embargo, tal y como recuerda su amigo Xavier Vidal-Foclh, “su enfermedad del pulmón, molesta y lacerante, doblegó su cuerpo frágil, pero no aplacó su tesón, ni su ironía. Hasta el último minuto estuvo al mando de su vida, también la profesional, escribiendo sus artículos de análisis en El País”. Y lo hizo siguiendo a rajatabla el imperativo que impregna toda sus trayectoria profesional:  inquietar siempre a los poderosos sin nunca molestar a las gentes de bien.

Su trayectoria en los medios
Una trayectoria que se remonta a mediados de los años 60, ejerciendo como corresponsal en España de la revista francesa Marie Claire. Desde 1971 hasta 1974 trabajó como redactora de la revista de monografías económicas Dossier Mundo, en la que también fue redactora jefe. En 1974 se incorporó a la redacción del Diario de Barcelona, primero en la sección local y con posterioridad como directora del dominical. En 1978 abandonó este medio junto con una treintena de periodistas. Empezó a trabajar entonces como redactora en el recién creado El Periódico de Catalunya, en el que además de articulista fue jefe de las secciones de Espectáculos y Suplemento y directora del "Dominical" (1978-1981). Tres años más tarde empezó sus exitosas colaboraciones con Televisión Española. En 1988 se incorporó como delegada de la Agencia Efe en Cataluña, donde impulsó el servicio de noticias en catalán. Después recaló en La Vanguardia (protagonizando durante más de cuatro años su contraportada) y años más tarde en diario El País, Le Monde Diplomatique, o la revista Qué leer.

Decenas de buenas obras
En su vertiente como escritora y ensayista ha publicado varias decenas de libros: Anticoncepción y control de natalidad (1976), La moda ¿comunicación o incomunicación? (1977), Historia de la media (1983), La generación del cambio (1984), La aventura de envejecer, del mito de la menopausia al deterioro físico (1987) -junto con el ginecólogo Santiago Dexeus, con quien había escrito su primer libro sobre la anticoncepción-, Pasqual Maragall: un rebelde en el poder (1991) -junto con Xavier Febrés-, Gramática de la moda. Lo cursi y el poder de la moda (1992)- por el que ganó el Premio Espasa Mañana de Ensayo-, Cómo ser progre y de derechas (1993) , Periodista (1994), Yo me escapé (1995), Vivir la madurez con optimismo, la apasionante aventura de envejecer (1995) -también con Dexeus-, La década de la decencia: intolerancias 'pret-a-porter', moralina mediática y otros indecencias de los años noventa (1995), El problema (1996), Diccionario de la moda (1996), El universo de Francis Montesinos (1996) -con José Gandía Casimiro-, El segundo poder (1998) -medio centenar de entrevistas con personas relacionadas con la prensa-, Serrat y su época. Biografía de una generación (1998), Crónicas virtuales. La muerte de la moda en la era de los mutantes (1998),  Mujeres y hombres: la impía rebelión (1999) -con Salvador Giner-, El mundo según las mujeres (2000), El problema Madrid-Barcelona (2000), El tabú : madre e hija frente a la regla (2001) -con su hija Clara Cominges Rivière-, la novela El diario de Paloma Guerra (2002), 3x1 (2003) -junto con Teresa Pàmies y Pilar Rahola-, Serrat: a los 60 años (2003), El malentendido: cómo nos educan los medios de comunicación (2003), la biografía para el catálogo de la exposición del diseñador Manuel Pertegaz en el Centro de Arte Reina Sofía (2004) y El placer de ser mujer (2005).

Reconocimiento a su labor
Galardonada con el premio Ciudad de Barcelona de periodismo en 1983, en 2007 le fue concedido el premio "Reconocimiento a la trayectoria europeísta", que otorgan de forma conjunta el Patronato Catalán Pro Europa y la Asociación de Periodistas Europeos de Cataluña.

Rivière estaba casada con el periodista y crítico de cine Jorge de Cominges y tenía dos hijos, Hugo y Clara.