La devaluación interna en España sigue galopando, los datos del Índice de precios al Consumo confirman que estamos en deflación (-1,1%) con ocho meses consecutivos con la inflación en negativo. La subida de precios de los carburantes del último mes, consentida por el Gobierno, fue consentida precisamente para evitar que la deflación se agrave aún más. Uno de los factores que contribuyen a la deflación es la bajada continuada de los salarios. Rajoy y su Gobierno proclamaron en 2013 el fin de la crisis y en 2014 el comienzo de la recuperación, esa recuperación no llega a los salarios dado que han encadenado cuatro trimestres consecutivos, un año, de descensos en y tasa interanual.

Coste laboral
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha confirmado que en el último trimestre de 2014 el coste laboral de las empresas descendió un 0,5% respecto al mismo período de 2013. Fue además el descenso más acusado de todo el año pasado, con lo que no se corresponde la recuperación económica que pregona el Gobierno con la realidad de los hogares. El coste laboral incluye los costes salariales más cotizaciones y provisiones y a finales de 2014 el coste laboral de las empresas descendió a 2.638,8 euros. El principal componente del coste laboral es el salarial, y éste también sigue bajando. Concretamente en el cuatro trimestre del año pasado anotó un descenso del 0,2%, acumula un año entero de descensos y se ha situado en 1.991,84 euros de media por trabajador al mes.

Costes no salariales
Los costes no salariales descendieron al cierre de 2014 un 1,5% en tasa interanual. Dentro de este apartado el más importante son las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social que fueron de media 584,52 euros por trabajador, un 1,8% más que en el mismo período de 2013. Las percepciones no salariales bajaron un 18,3%. Las subvenciones y bonificaciones aumentaron un 18,3%.

Menos horas trabajadas
Los datos del INE confirman que la jornada laboral de 40 horas remuneradas  a la semana es ya historia. La jornada media pactada en el último trimestre de 2014 fue de 34,3 horas semanales, aunque la jornada 'efectivamente' trabajada fue de 29,8 horas semanales. La jornada efectivamente trabajada se calcula después de descontar las horas perdidas de media a la semana, 4,6 horas (la mayoría por festivos) y sumar las horas extraordinarias. El coste laboral por hora efectiva trabajada descendió en un 1,2% hasta los 20,34 euros.