El hombre que no sabía nada, no conocía a nadie ni se reunía con nadie. Podría ser la descripción más acertada de la imagen que quiso transmitir Ángel Acebes durante su declaración ante el juez Pablo Ruz, a la que ha tenido acceso este periódico. Acebes sólo aceptó responder a las preguntas del magistrado, del fiscal y de su abogado, lo que no es decir mucho, dado que su letrado no quiso realizar preguntas y el fiscal parecía actuar más como defensor que acusador.

De todo el interrogatorio, quizás lo más interesante es el renuncio en que se pilló a Acebes cuando negó por activa y por pasiva conocer a Gonzalo Urquijo, el arquitecto que realizó las obras en la sede del Partido Popular y que fueron pagadas con dinero negro, según el magistrado.

La relación con Urquijo
Así preguntaba Ruz: "En relación a la contratación de esas obras y la adjudicación a la empresa Unifica Servicios Integrales SL, de la cual era titular el Sr. Gonzalo Urquijo, ¿usted participó de alguna manera en todo este proceso de adjudicación? ¿Mantuvo alguna reunión con la empresa?".

"Jamás me he reunido con ellos"
La respuesta de Acebes fue: "Cómo se adjudicó, a quién se adjudicó, de esa empresa no conozco a nadie, jamás me he reunido con ellos ni he participado en ninguna reunión que tenga que ver ni con la contratación, ni con los ingresos, ni con los pagos de esa obra. Porque no era mi responsabilidad".

"Ni le conozco ahora"
Pero Ruz, insistía:"¿Usted al Sr. Urquijo, Gonzalo Urquijo lo conocía por entonces o le llegó a conocer en algún momento? ""Ni le conozco ahora- contestaba Acebes, que por si acaso ya se cubría las espaldas- Hombre, yo sé que en algún sitio me ha saludado, en algún acto o alguna vez que [ininteligible] la sede, yo no reconocería a este señor. No lo he conocido nunca ni he hablado con él jamás ni he tenido una reunión ni en el ámbito profesional ni en el ámbito personal".

Las fotos con Urquijo
Es entonces cuando Ruz da la sorpresa y habla de "una serie de fotos en las que al parecer hay un encuentro con responsables de la empresa en… desconozco dónde, pero un encuentro en el que, entre otras personas, aparece usted con el Sr. Gonzalo Urquijo. Le voy a exhibir la fotografía por si sabe usted ubicarme este encuentro donde se produjo y a qué obedecía, ¿de acuerdo?".

La copa de Navidad
Acebes contesta entre balbuceos y pausas: "Sí, creo, por donde se celebra la… por las personas que están y por la sala donde nos encontramos, yo creo que eso es una sala de la planta segunda y esa es la copa de Navidad. Esa es la copa de Navidad a la que asiste, invita el gerente, a la que asiste todo el personal del partido y probablemente si estaba trabajando este señor, pues… Pero he visto ahí que estamos toda la dirección del partido, ya veo que está Rajoy, que está… Eso… eso es que estábamos… yo creo que, por donde se celebraba, es la copa de Navidad. Es decir, es probable que nos representasen, se lo he dicho antes en la respuesta, es probable que me lo hayan presentado a este señor, pero vamos, que ahora que he visto la foto no le reconozco. Si me lo encuentro por la calle no le reconocería, tenga en cuenta que a lo mejor a ese acto van 300 o 400 personas".

Negaciones tajantes
El ex ministro sale como puede del apuro, pero el renuncio deja en entredicho todas sus tajantes afirmaciones de antes, negando que hubiera una caja B en el partido o que él diera orden de comprar acciones de Libertad Digital con dinero negro.

El papel del fiscal
El interrogatorio, dado que el abogado de Acebes no quiere preguntar ni él responder a los letrados de las partes, lo termina el Ministerio Fiscal, que se limita a preguntar uno por uno si conoce a alguno de los supuestos donantes del PP referidos en los papeles de Bárcenas. Lo más curioso es cuando le pregunta acerca de los sobresueldos en el PP y ya de antemano le da una excusa: "Vamos a ver, antes le preguntaba Su Señoría sobre una secuencia de pagos que hay en los papeles, en esta presunta contabilidad B en el que pues trimestralmente aparece un pago de seis mil… anotado, de 6.300 euros, en este caso con su nombre. Ya ha respondido usted que no recibió esa cantidad. ¿Recuerda si había alguna cantidad asignada para la atención de gastos corrientes, pues bueno, coger un taxi, en fin, una serie de gastos que recibiera en efectivo y que luego tuviera que justificar o no?". Una durísima fiscalización.