El expresidente de la Generalitat Jordi Pujol es ya oficialmente un pensionista, y, en su caso, feliz, ya que percibirá catorce pagas anuales por un importe de 2.550 euros, que es la máxima en el sistema español.

Se vio forzado a quedarse sin su paga de expresident
Jordi Pujol pidió cobrar la pensión después de que renunciara a la paga anual vitalicia de 86.400 euros que recibía en su condición de expresident, que representa el 60% del sueldo que tenía cuando estaba al frente de la Generalitat, según datos de La Vanguardia. En realidad, no le quedó más remedio que renunciar a la paga, ya que el Govern tenía la intención de dejarle sin ella tras el escándalo de sus cuentas en el extranjero no declaradas a Hacienda.

Sólo una sentencia judicial podría quitarle la pensión
Pujol ha desempeñado cargos públicos desde 1977, primero como conseller del primer Govern provisional, diputado después en Madrid y presidente de la Generalitat desde 1980 hasta el 2003. Según la legislación, tiene derecho al cobro de la pensión de jubilación, que una vez obtenido tan sólo se le podría aplicar algún embargo parcial sobre el importe por medio de una sentencia judicial, .

Mientras, el expresident sigue en el objetivo de investigaciones, incluso fuera de España, como la llevada a cabo por un juez de Liechtenstein por presunto blanqueo de capitales. Sobre el oficio policial sobre esta investigación, Pujol respondió al ser preguntado por los medios, este miércoles, que "nunca" ha tenido cuentas bancarias en Liechtenstein”.