Si la zona euro es en estos momentos la principal preocupación de la economía mundial, si España es una de las economías más importantes de la zona euro y si Cataluña representa  el 19% del PIB español, es obvio que tanto los gigantes financieros como las principales agencias de calificación estén elaborando estudios y análisis para ofrecer a sus inversores sobre la incertidumbre que genera la situación política catalana. El más llamativo, porque se atreve a definir cuatro posibles escenarios e incluso da porcentajes de probabilidad de que se hagan reales, es del de Morgan Stanley.

Independencia acordada 15%, unilateral 5%
El gigante financiero norteamericano ha publicado en las últimas horas un informe sobre la situación política en Cataluña en el que analiza los cuatro posibles escenarios tras la convocatoria de la consulta  independentista. Dichos escenarios son: independencia unilateral, independencia acordada, nuevo acuerdo fiscal y que no haya acuerdo alguno. A la posibilidad de que Cataluña declara la independencia unilateralmente le concede un 5% de probabilidad, al escenario de una independencia acordada con el Gobierno central un 15%, al escenario de que no haya acuerdo alguno un 30% y a la posibilidad de que la crisis política concluya con un nuevo acuerdo fiscal (una nueva financiación para Cataluña) le da un 50% posibilidades. En definitiva Morgan Stanley (MS) apuesta por lo razonable y es que para salir del atolladero debe haber un acuerdo entre Madrid y Barcelona.

Diferencias con Escocia
El banco de inversiones norteamericano incluye en su informe un análisis sobre coincidencias/diferencias entre Cataluña y Escocia y concluye que son procesos diferentes, pero también que el proceso catalán tiene raíces más profundas y mayores consecuencias económicas si Cataluña se independizara. Para empezar M.S. señala que el deseo de independencia tiene más apoyo social en Cataluña que en Escocia, en segundo lugar que en Reino Unido hubo consenso político que realizar el referéndum y en España no y, por último, Cataluña representa cerca del 20% del PIB español mientras que Escocia proporciona el 10% del PIB del reino Unido.

Inquietud entre inversores
A medida que nos acercamos al 9 de noviembre aumenta la inquietud entre los inversores. La prima de riesgo ha subido ligeramente (por encima de los 120 puntos básicos) y también los intereses  del bono español a 10 años (por encima del 2%). No se puede hablar de oleada vendedora, pero Morgan Stanley ya advierte de "mayores turbulencias" en la capacidad de financiación del Estado español si la incógnita de la celebración del referéndum catalán se prolonga en el tiempo.

De momento la agencia de calificación Fitch ha puesto en perspectiva negativa al bono catalán hasta la BBB-, a tan solo un paso del bono basura y dos escalones por debajo de la deuda española. La agencia considera que si Cataluña se independizara tendría serios y graves problemas para financiarse.