Recientemente desde ELPLURAL.COM informábamos como la Policía Local de Málaga denunciaba a un persona que ataviada de payaso, repartía globos por el centro de Málaga pidiendo la voluntad. Según la denuncia el Ayuntamiento regido por el popular Francisco de la Torre, no tenía "licencia" para ejercer de clown ambulante. Por ello se le impuso una sanción de 250 euros.

Multa a una anciana pensionista por dar de comer a las palomas
También este medio se hizo eco de otra denuncia a una mujer pensionista de 80 años de edad que en un cementerio malagueño daba de comer a las palomas. Por eso, también fue sancionada la anciana que apenas llegaba a fin de mes con su pensión de 600 euros. De nuevo otro ridículo pero lamentable suceso de este tipo tiene como protagonista a la capital malagueña. Asimismo se le prohibió acudir a dicho cementerio.

Reunidos en una plaza de Málaga
En este caso se trata de ocho jóvenes de entre 20 y 30 años que han sido multados cuando se encontraban jugando al parchís y consumiendo bebidas sin alcohol en una plaza de Málaga de madrugada, por lo que deberán pagar cada uno 101 euros, según informa el diario Málaga hoy.

La Policía les pide la documentación
Este grupo de amigos se había reunido sobre las 23.00 horas del pasado miércoles como cada noche y, tres horas más tarde, cuando cuatro de ellos jugaban al parchís sentados en un escalón mientras las chicas conversaban, la Policía Local requirió a uno de ellos su documentación.

Ruido de los cubiletes
Conchi Toro, 29 años, ha explicado al periódico malagueño que no esperaban que fueran a multarlos y que les dijeron que "no se puede consumir nada y que habían recibido quejas de vecinos a los que les molesta el ruido de los dados con el cubilete". Recuerda que portaban dos botellas de agua y una lata de refresco de cola vacías y que junto a ellos también había una silla de playa en la plaza, situada en el barrio de La Purísima, próximo a la calle Eugenio Gross.

Se reúnen allí desde hace 25 años
"La Policía empezó a sacar las denuncias para que las firmáramos. Nos quedamos muertos porque no estábamos ni siquiera chillando, sólo hablando", comenta. Añade que no han cometido "ningún delito"; que en esa plaza se juntan todos desde que empezaron a andar, "hace más de 25 años", y que les dijeron que eran muchos y que no podían hacer "una reunión así como así".

Consumir bebidas en zonas no autorizadas
La Policía, según consta en el escrito citado por el rotativo, justificó su actuación en la "permanencia y concentración de personas consumiendo bebidas en zonas no autorizadas". En el caso de los chicos los hechos denunciados se refieren "al consumo de bebida sin alcohol y jugar al parchís", mientras que en el de ellas se destaca sólo lo primero.

Los jóvenes están en el paro
La multa para los ocho es la misma, que consideran "excesiva" y que tienen previsto recurrir. "No tenemos forma de pagar la sanción. Excepto dos, todos estamos en el paro. Una de mis amigas tendría que trabajar una semana entera como repartidora para asumirla", se lamenta Conchi.

"No armaban jaleo y bebían agua"
Ana, otra sancionada, cree "indignante" la situación y añade que sale de una hamburguesería todas las noches a la 1.00 y se pasa únicamente a ver a sus amigos como para que le multen "por beber agua en la calle". Aída precisa que estaban "muy tranquilos sentados tomando el fresco y no armando jaleo" y que si les multan "por dos simples botellas de plástico, que no estaban ni llenas, ¿qué será lo siguiente?", mientras Francisco lo ve "una vergüenza" y explica que cada uno vive en una calle que desemboca en la plaza.