Desde el año 2003 el Consell ha venido realizando encuestas a la población valenciana de valoración de calidad de gobierno y su satisfacción. También se ha querido hacer una ponderación sociológica de cómo ve la población el trabajo de la oposición. Han costado 11,5 millones de euros. La Generalitat ha escondido los resultados once años. Tras siete sentencias desfavorables, las insinuó en enero y las ha empezado a publicar en su web en mayo.

Mintiendo a la oposición
El Govern ha negado diez años la información de las encuestas a la oposición alegando que los datos de esos estudios sociológicos tiene sólo “carácter auxiliar para la evaluación y definición de políticas públicas y no aborda cuestiones relacionadas con la intención de voto ni con las valoraciones personales de los líderes políticos”. Esta razón no le ha servido al TSJ que ha desestimado al entender que el Gobierno valenciano estaba vulnerando el carácter público de los datos e informes y el derecho de los parlamentarios a acceder a esta documentación.

Encuestas cargadas de información electoral
Lo que Fabra y su ejecutivo llamaba “valoración de políticas públicas” era realmente un auténtico sondeo electoral, con importantes estudios de mercado. En esas encuestas, desde 2010 sobre todo, se pregunta por temas tan útiles para los políticos como la opinión de los valencianos sobre un posible gobierno de coalición de izquierdas, la labor de oposición (del PSPV, Compromís y EU), la valoración de la actuación de los portavoces parlamentarios tras el debate de política general o la necesidad de convocar elecciones generales.

Volcado de datos en agosto
Siendo portavoz del Consell José Císcar, el pasado mayo se publica la encuesta de abril de este año. No hay ninguna pregunta de la oposición. A principios de agosto, el Consell vuelca en su página web gva Oberta decenas de sondeos realizados entre 2004 y 2013. En todos ya se pregunta sobre la labor de oposición y sobre el partido que tiene los mejores liderazgos. Fran Ferri, diputado de Compromís, preguntó el pasado 1 de septiembre en las Cortes por qué no se habían publicado todas las encuestas. Inmediatamente aparecen los barómetros realizados desde 2004 y que han costado cerca de 1,5 millones de euros.

Malos datos para el PP
Desde 2010 la sociedad valenciana empieza a cambiar su sentido de voto y aumenta la pérdida de confianza en la gestión de Fabra. Entendiendo cero como la extrema izquierda y diez la extrema derecha, en 2009 la sociedad estaba en un 5,2, y el pasado enero en un 4,6. En el mismo informe de enero un 62,8 de los valencianos calificaba de mala o muy mala la gestión del Consell y más del 80% no confiaba en su presidente Alberto Fabra. El 30,2% declaraba tener poca confianza y el 53% de los valencianos ninguna.

Suben PSPV y Compromís
La valoración de la labor de oposición en ese informe de enero, especialmente del PSPV y Compromís, había mejorado mucho respecto al sondeo anterior de octubre de 2013. Los datos son demoledores para el PP. El 53,5% considera un posible gobierno progresista de coalición como buena solución a la situación de la Comunidad. Por si fuera poco, el 52,6% lo considera un cambio muy necesario . Además, las encuestas encargadas por el Consell se interesaban por las posibles debilidades del tripartito e interrogaba a los valencianos si asociaba un gobierno de progreso de coalición con el independentismo (57% no y 25,7% sí), el catalanismo (60,3% no y 24,8% sí) o el radicalismo de izquierdas (53,2% no y el 31,5% sí). Conociendo estos datos, se entiende el por qué de la actuación del PP en Valencia el último año.