El religioso, que había sido repatriado desde Liberia el pasado 7 de agosto infectado de ébola, no ha logrado responder al tratamiento con el fármaco experimental ZMapp que se le estaba suministrando y que se le suministraba desde hacía 24 horas.



El sacerdote estaba ingresado desde el pasado jueves en el Hospital Carlos III de Madrid. El fármaco, el llamado 'suero milagroso', que en su caso se ha mostrado ineficaz, sí esta teniendo buen resultado en los dos contagiados que están siendo tratados en Estados Unidos, un médico y una voluntaria.


La muerte de Miguel Pajares se ha producido este martes a las a las 9.28 a causa, según han anunciado las fuentes del hospital madrileño. El sacerdote, que era miembro de la orden de San Juan de Dios, había ocupado hasta su viaje a Madrid el puesto de superior del hospital de San José en Monrovia, Liberia. En las últimos horas en el país africano habían fallecido otros dos compañeros religiosos de Pajares que también habían trabajado en el mismo hospital, George Combey y Chantal Pascaline.

Mientras, la religiosa que llegó con el padre Pajares, la hermana Juliana, va ser sometida a un tercer test con la intención de descartar definitivamente que esté afectada por el ébola.