La directora general de Salud Pública, Mercedes Vinuesa, y el presidente de Gobierno, Mariano Rajoy



El presidente Mariano Rajoy ha comparecido este viernes tras reunirse en el Palacio de Marivent con Felipe VI para anunciar entre otras cosas que el Gobierno asumirá todos los gastos derivados de la repatriación a España de los religiosos Miguel Pajares, enfermo de ébola, y de Juliana Bonoha Bohé. El presidente ha presumido de que asumir los costes, que se estiman en unos 400.000 euros, es "de puro sentido común".

Sorpresa por el desconocimiento del presidente
Pero en la comparecencia Rajoy ha ido más allá al asegurar que desconocía el origen de las informaciones que apuntaban a que parte de la factura de la repatriación podían derivarse a la orden religiosa a la que pertenece Pajares: "Yo, desde luego, no me he planteado nunca ese asunto y espero que esta polémica quede zanjada en el día de hoy". Y se ha quedado tan ancho el presidente.

El origen del 'fuego' está... en el propio Gobierno
El problema para Rajoy a la hora de vender ahora "sentido común" es que las informaciones parten de un alto cargo del ministerio de Sanidad, concretamente de la directora general de Salud Pública, Mercedes Vinuesa, a la que endosaron el 'marrón' de comparecer por la repatriación en lugar de la ministra, Ana Mato. Vinuesa afirmó que la orden religiosa a la que pertenece Pajares "asumiría los costes que tuviese que asumir" después de afirmar que el Gobierno abriría gestiones para ello. Por suerte para Rajoy hay imágenes del momento para que no quede lugar a dudas.