Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba y Joaquín Almunia, junto al nuevo secretario general, Pedro Sánchez. Foto: PSOE



Ya se había vendido todo el pescado. Faltaban apenas dos horas para que se iniciara el discurso del nuevo secretario general y se pusiera broche a su Congreso Extraordinario cuando uno de los dos únicos presidentes autonómicos socialistas se puso delante de los periodistas. Hablamos de Javier Fernández, el asturiano, el que había apoyado con toda su fuerza a Eduardo Madina durante las primarias, el que el jueves pasado había recibido una llamada personal de Pedro Sánchez diciéndole que seguiría presidiendo el Consejo Federal del PSOE (el cónclave de barones del partido) y que, sin embargo, 24 horas después se enteraba de que no, que iba a ser sustituido en ese puesto por Susana Díaz, la otra presidenta autonómica socialista, la que había apoyado con toda su potencia al nuevo secretario general…

"hay lo que hay"
Y los periodistas le preguntaron a Javier Fernández una y otra vez si se sentía traicionado, si habían cumplido con lo que le habían prometido, si había integración… Y Javier Fernández, entre silencios valorativos, y respuestas preparadas –“Asturias tiene más representación que nunca en la Ejecutiva (tres miembros)”; “no podemos negar que teníamos otras expectativas, pero ha habido una tarde y una noche de muchas negociaciones”…-, entre todo esto, el presidente asturiano dijo la frase que explica todo:

-“Los Congresos los vivo con una cortina de amnesia inmediata”.

Traducción, la que mostraban sus gestos y miradas: una cosa es lo que te han dicho previamente y con la idea que se llega a un Congreso, y otra son los hechos, con lo que se sale de ellos. Así que es mejor olvidar todo lo que se ha hablado antes, porque ‘hay lo que hay’ y eso es lo que cuenta: una cortina de amnesia inmediata, en este sentido, sin duda ayuda.

El tsunami Susana
Esto era lo que decía por fin la mañana del domingo, cuando ya no había nada que negociar, Javier Fernández, quien durante el sábado, el día de las negociaciones, anduvo por los pasillos sin ocultar su cara de monumental enfado. Sin que le importara que se notara. Es más, ‘su gente’ no dudaba en contar a todos lo que ya hemos dicho: “el jueves le llamó el propio Sánchez y le aseguró que seguiría presidiendo el Consejo Federal (el órgano de los barones, fundamental porque es el que orienta al partido y prioriza asuntos y debates), y a la hora de la verdad le sustituye sin explicaciones por Susana”.

Pero es que 'el tsunami Susana' estaba en cada esquina de cada pasillo del Congreso, arrollándolo todo a su paso. Para ella la presidencia del Consejo Federal. En la Ejecutiva, ocho asientos (uno de cada cinco) para su gente del PSOE andaluz. En el Congreso, la secretaría general del Grupo Parlamentario. En el Comité Federal, que por cierto va a ser el más numeroso de la historia, una pequeña legión… “No se trata de controlar el partido, sino de ocupar el lugar que le corresponde a Andalucía”, decía uno de los cercanos a la presidenta andaluza.

Pero la posibilidad de que ese 'lugar' sea demasiado visible y pueda producir rechazo había otros andaluces que lo temían. Un delegado y un invitado, los dos cordobeses, preguntaban a este periodista: “¿Cómo se lo están tomando en las otras territoriales (el poderío del sur)?”. Y ellos mismos se respondían con una anécdota: “es que anoche (por el sábado) se dieron cuenta de que habían dejado fuera Córdoba, y presionaron para que hubiera representación en la dirección de los órganos de cada una de las ocho provincias”.

Tomás Gómez también sale feliz, aunque antes Pedro Sánchez no fuera 'uno de los suyos'
Eso sí, no eran los andaluces, ni mucho menos, los únicos que estaban felices. La dirección de Madrid no está menos satisfecha con la unificación de esta dirección del PSOE. “Tenemos cinco miembros en la Ejecutiva”, decía un portavoz madrileño con sonrisa de oreja a oreja. Entre ellos, el propio presidente, Tomás Gómez.

Casi un milagro si se tiene en cuenta que hace un nada de tiempo, Pedro Sánchez, entonces uno de los jóvenes de Pepe Blanco y de quienes apoyaban ciegamente a Rubalcaba, era despreciado por los socialistas madrileños hasta el punto de que fueron la única federación que se abstuvo de aprobar las listas del PSOE para el Congreso cara a las generales de 2011. Y la causa no fue otra que la imposición ante la dirección madrileña por parte de Rubalcaba para colocar a Pedro Sánchez en el puesto 13 de la lista por Madrid…, un puesto que entonces se pensaba que aseguraba escaño, aunque luego la realidad fue más dura con el PSOE.

Chacón cree que es ya hora de unidad en este partido
También estaba muy satisfecha Carme Chacón. Quizás el miembro de la Ejecutiva que más sorprende ver ahí a todos (desde algún muy veterano y de mucho peso líder en el partido, hasta muchos de quienes la apoyaron frente a Pérez Rubalcaba). En los pasillos se le acercaron unos militantes que, por sus expresiones, sin duda la valoran y mucho: “¿vas a tirar de la Ejecutiva, no?”, le preguntaron después de hacerse una foto con ella.

Pero lo cierto es que Chacón asegura que está muy feliz en la Ejecutiva, que la invitó el propio Secretario General, que ella dijo lo que quería, la secretaría internacional, que se lo dieron y que se siente muy cómoda en el recién nacido máximo órgano de poder del partido aunque muchos de quienes ahora ‘mandan’ en el PSOE son quienes estuvieron contra ella en el pasado Congreso: “es hora ya de unidad en este partido”. Y remata con mucha convicción con una idea: “Pedro Sánchez es un gran activo del partido y hay que aprovecharlo al máximo”.

Los 'madinistas' no logran caer en la amnesia inmediata
A quienes parece que no les acaba de llegar ‘la amnesia inmediata’, por lo que decían por los pasillos’, es a quienes se alinearon con Eduardo Madina. Para ellos no se ha producido la ‘unificación’, palabra que se ha utilizado en cada uno de los discursos repetidos en el Congreso. Se quejan de que Pedro Sánchez no ha hablado directamente con Madina ni antes ni durante el Congreso. Que los únicos contactos fueron a través de intermediarios. Que ni uno sólo de quienes eran ‘el núcleo duro’ del ‘madinismo’ está en la Ejecutiva. Y que de los 107 nuevos miembros del Comité Federal, sólo uno, el propio Eduardo Madina, es de ‘ellos’.

Incluso se mostraban más frustrados que los de Izquierda Socialista, que parecen satisfechos por la representación que les han dado en el Comité Federal, aunque Beatriz Talegón, que se ha convertido vía redes sociales en la voz-protesta de este grupo que lideró José Antonio Pérez Tapias, se quejó de que se aprobó el nombramiento de Pedro Sánchez por aclamación y no votando.

En cualquier caso, sea por amnesia inmediata, o no.., lo cierto es que de 990 votos de delegados para elegir a la Ejecutiva, sólo 136 votaron en blanco (no había otra lista alternativa), y 864 a favor. Es decir. Hay una realidad imbatible que en los pasillos todos aceptaban: un 86,9% de los delegados han aprobado el ‘Gobierno’ de Pedro Sánchez. Que además se llevó una foto de mucho peso para el recuerdo: salió al escenario rodeado de los otros cuatro únicos secretarios generales que en la historia moderna del PSOE ha habido: Felipe González, Joaquín Almunia, José Luis Rodríguez Zapatero y Alfredo Pérez Rubalcaba. Los cuatro con él, enganchados a sus costados, ‘amnesia inmediata’ aplicada a todo lo que hubieran hecho o dejado de hacer y decir en los meses y semanas previas a este Congreso que todos los que subieron a la tribuna, repitieron, ha sido Extraordinario.