Es difícil entender que una veintena de residencias públicas destinadas a albergar a personas mayores, construidas con fondos autonómicos y cientos de millones de euros en época socialista, permanezcan cerradas desde hace tres años a pesar de que más de dos mil personas mayores esperan un plaza para poder residenciarse. Pero no es tan extraño si decimos que ese lugar donde se encuentran los edificios acabados desde 2011, pasto de la maleza y del abandono más bochornoso, no es otro que un lugar llamado Castilla-La Mancha; entonces, a nadie sorprende que esta cruenta realidad exista en esta comunidad porque en ella reina por ahora la secretaria general del PP, María Dolores Cospedal.

¿Por qué no las abre?
Es la herencia recibida. Es el resultado de la unión entre el Gobierno autonómico, presidido por el socialista José María Barreda, y las diputaciones de Castilla-La Mancha, en esa época también bajo presidencia del PSOE. “Cospedal no puede soportar que residencias de mayores construidas por nosotros puedan dar servicio en la actualidad a numerosos ancianos que esperan desde hace meses poder ingresar en una de ellas”, reconoce a ELPLURAL.COM un alcalde del PSOE en cuya localidad existe uno de esos edificios cerrados por el antonjo de Cospedal. “Le da igual que miles de ancianos estén desatendidos, que no tengan dónde caerse muertos, hablando en plata, y todo por su enfermizo afán del déficit y de negarnos el pan y la sal”, concreta.

Hospitalito del Rey



Hospitalito del Rey de la capital...
El caso más sangrante de la “veganza” de Cospedal contra los socialistas, es el llamado Hospitalito del Rey, un mastodóntico edificio en el casco histórico de Toledo, pegado a la catedral, cuya rehabilitación alcanzó los 10 millones de euros y que desde el verano del 2011 permanece cerrado a cal y canto porque a Cospedal “no le dá la gana abrirlo y permitir así que uno de los barrios con la población más envejecida de la ciudad tengan la oportunida de ser uno de sus residentes”, reconoce a este periódico un concejal del PSOE toledano. “Ella odia toda la herencia de Barreda; le salen granos sólo de pensar que tiene que reconocer las cosas bien hechas por el anterior gobierno”.

...O la residencia de Illescas
Pero da igual. Es lo mismo mirar a Toledo, a Cuenca o a Guadalajara. En todas las provincias hay centros de mayores que no han llegado a abrir sus puertas por el mero hecho de haber sido contruidos por el anterior gobierno socialista. En este sentido, el PSOE de Illescas (Toledo) ha hecho público un comunicado donde denuncia “los tres años de abandono por parte del Gobierno del PP y de la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, de la residencia de mayores y centro de día de Illescas que se encontraron terminada y equipada en 2011 y que no han querido poner en marcha”, añaden, “los yerbajos y la maleza siguen invadiendo este centro residencial que el Gobierno socialista dejó listo para su apertura al término de la anterior legislatura y que Cospedal no ha abierto sus puertas para ponerlo a disposición de los mayores y crear el tan necesitado empleo en nuestro pueblo”.

Centro de Ancianos de Illescas



Dos mil ancianos, pendientes de Cospedal
Lo triste de todo este asunto, que una vez más descubre la cara neocon de Cospedal, capaz de abandonar a su suerte a los más desfavorecidos (niños, dependientes, enfermos crónicos, viudas, maltratadas o ancianos), es que en Castilla-La Mancha la lista de espera de personas mayores para ingresar en una residencia es superior a la media nacional. Es más, según los datos del Gobierno de Rajoy, la comunidad presidida por María Dolores Cospedal ocupa el primer puesto en el abandono de las personas mayores. Y es que el PP castellano-manchego destaca siempre en estas aberrantes estadísticas.