El expresidente del Barcelona Sandro Rosell, a su llegada esta mañana a la Audiencia Nacional para responder a las preguntas del juez Pablo Ruz sobre su imputación por un delito de apropiación indebida en el fichaje del delantero brasileño Neymar, lo que provocó su dimisión al frente del club. EFE



Tras escuchar la rocambolesca declaración de Sandro Rosell, expresidente del FC Barcelona, imputado por un presunto delito de apropiación indebida (9,1 millones de euros) en el fichaje del futbolista brasileño Neymar, Pablo Ruz ha decidido tirar de la manta. Y como está harto de que desde el pasado 22 de enero los directivos y asesores jurídicos azulgranas le tomen el pelo, piensa llegar hasta el final, cueste lo que cueste, para desenmascarar todas las ilegalidades que en los últimos tiempos se han cometido en Can Barça.

Lo de Rosell, una tomadura de pelo
Lo que menos se esperaba el juez de la Audiencia Nacional es que el expresidente Sandro Rosell, imputado por un presunto delito de fraude fiscal desde el 22 de enero (al día siguiente presentó la dimisión) es que tras declarar más de tres horas en la Audiencia Nacional se quedará tan ancho al asegurar: “Yo nunca la letra pequeña de los contratos que firmo. Pero el contrato de Neymar es legal, ascendió a 57 millones de euros y hay que felicitar a los servicios jurídicos del club por el trabajo que realizaron”.

Pablo Ruz, alucinaría en colores
Al escuchar cada una de las declaraciones del que fuera máximo responsable del FC Barcelona, los asistentes debieron quedarse patidifusos. ¿Qué el presidente del Barça, acusado de un delito de fraude fiscal de 9,1 millones de euros, nunca lee la letra pequeña de los contratos que rubrica? ¿Cómo es posible que Rosell siga defendiendo que Neymar sólo le costó al Barça 57 millones de euros, cuando los actuales directivos del club ya reconocen que la operación superó los 82,6 millones de euros?  ¿Quién dice la verdad Sandro Rosell, o el actual presidente Josep María Bartomeu? Y para que la fiesta en la Audiencia Nacional fuera completa solo faltó que Antonio Rossich, director general del Barça, afirmará en su declaración: “El fichaje de Neymar salió tan barato merced a la capacidad de seducción de Sandro Rosell”.

Bartomeu y el papá de Neymar, al banquillo
Pablo Ruz lo anunciará en los próximos días e imputará al actual presidente del FC Barcelona, Josep María Bartomeu (¿presentará la dimisión, como hizo su amigo Sandro Rosell, cuando reciba la notificación?) y a Neymar da Silva, padre del crack brasileño. Y es que el juez de la Audiencia Nacional quiere desenmascarar a unos y a los otros y saber porque para fichar a un futbolista extranjero, por muy estrella que sea, el Barça tuvo que firmar 10 contratos con el padre de Neymar y con el Santos, club propietario de los derechos del jugador.

Montoro, lo tiene claro
Para el ministro SUPERMAN (lo importante es recaudar), no hay duda. El Barça dejó de abonar a Hacienda, como mínimo, 9,1 millones de euros, en relación con el Impuesto sobre la Renta de los No Residentes (IRNR). Además, no tributó  el IRPF de los 37,9 millones de euros abonados entre 2011 y 2013 y tampoco ingresó a la Agencia Tributaria otros 2.600.000 euros en concepto de los pagos que ha efectuado a Neymar en 2014. No obstante, debo recordar que, aunque aseguran que no han cometido ninguna irregularidad, ni contable, ni fiscal, el Barça a finales del mes de febrero depositó en Hacienda 13,5 millones de euros en previsión de cualquier deuda tributaria.

Los juristas ‘culés’, sin vacaciones
Si se confirma que Pablo Ruz imputa a Josep María Bartomeu deberán trabajar día y noche diseñando una nueva estrategia para salvar a su presidente. O cuando declare ¿también dirá que él tampoco se lee la letra pequeña de los contratos que firma? ¡Por favor! En vez de reconocer que se equivocaron, pagan y a otra cosa mariposa, sentando cátedra y alardeando de la legalidad del contrato de Neymar. ¿Si no hay ninguna irregularidad por qué dimitió Rosell? ¿Por qué si estar acusados de nada pagaron hace cuatro meses, y a fondo perdido, 13,5 millones de euros? Seamos serios

 Ruz, no se chupa el dedo
Menos mal que la entendida afición barcelonista no se chupa el dedo. Y el juez Pablo Ruz y José Perals, el fiscal Anticorrupción tampoco. Ahora, como les de por investigar (me encantaría que lo hicieran) todos los contratos que han firmado, tanto Rosell como Bartomeu, desde que accedieron a la presidencia del FC Barcelona temblarán todos los cimientos del Camp Nou. Seguro.