Wyoming en 'El Intermedio'

 

 


“Las burradas se decían delante de una barra de un bar y ahora delante de un ordenador”, decía Wyoming en su programa, El Intermedio, al referirse a los crueles comentarios en Twitter con motivo del asesinato de Isabel Carrasco. Pero el presentador iba más allá y recuperaba “las interpretaciones” de editoriales y algunos periodistas de la derecha, analizadas este martes en ELPLURAL.COM, con la intención de vincular el crimen de León, que tuvo una motivación personal, con un ambiente sociopolítico del país.

Una izquierda radical benevolente con la violencia
Según destacó El Intermedio, estas interpretaciones “no tienen reparo en achacar la responsabilidad a una supuesta izquierda radical benevolente con las actitudes violentas”.

El programa ponía como ejemplo, además de algunos opinadores a los que ELPLURAL.COM se refirió ayer en algunas de sus informaciones, al presentador de La mañana de la COPE Ernesto Sáenz de Buruaga, que se prestó a servir de “altavoz” de comentarios impresentables en las redes sociales para “afianzar posiblemente tesis propias sobre el panorama sociopolítico”.

¡Vaya repugnancia!
Sáenz de Buruaga manifestaba su ‘malestar’ por los tuits indeseables referidos a la política popular asesinada: “Voy a leer sólo una… luego leeré dos más… porque me produce repugnancia absoluta”. Y empezó por éste: “bajo mi punto de vista merecía ser tiroteada y me alegro de que sea así”.

Lejos de ignorar este tipo de mensajes, por la “repugnancia” que según dijo le producía, Ernesto Sáenz de Buruaga los reprodujo para miles de oyentes. “Tal vez Buruaga no se detuvo a pensar que el autor de este comentario tiene sólo 378 seguidores, pero gracias a Buruaga lo han escuchado 900.000 personas”, se destacaba en El Intemedio.

“Les voy a leer otros porque hay miles, por desgracia, insistía Buruaga: ‘no me alegro de la muerte de nadie, pero uno recoge lo que siembra”; “¿ qué esperaban? algún día tenía que pasar’; “me alegro y que no pare la cosa” . Y terminaba Buruaga: “Nos vamos a otra cosa porque a mí me da asco”. Wyoming ironizó con la contradicción del periodista: “Menos mal que no los quería leer” y se preguntaba sobre “cuál es el interés informativo” de estos comentarios en Twitter.

 

 


Los que van a los domicilios de políticos
El programa también destacaba la intervención de la periodista Carmen Tomás en La Mañana de la COPE que vinculó, como han hecho otros opinadores, las manifestaciones de ciudadanos indignados con el crimen de León. Tomás señaló a los que van a los “domicilios de los políticos”, a los que les “insultan por la calle”. ¿Pero qué tiene que ver la política con este crimen? “El asesinato de Isabel Carrasco no tiene que ver con la política, de acuerdo, pero es que me da igual…”, reconocía la periodista.

Ignacio Camacho habla de una "yihad antipolítica"
El Intermedio
también recogía la columna de Ignacio Camacho, en ABC, que dejó entrever que el crimen de León ‘se veía venir’ y que forma parte de una “yihad antipolítica”:

 

 

“En medio de esta crecida de tensión demagógica, agresividad injuriosa y encono combustible no era aventurado presentir un salto cualitativo en el que la ofuscación armase alguna mano perturbada (…) A la presidenta de la Diputación de León la mataron ayer dos veces. Una por presunta venganza y otra por pura fobia antipolítica”.