El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, ha comparecido hoy ante la Comisión de Interior del Congreso. EFE



Con un mes de retraso y después de las quejas y denuncias de sindicatos policiales, el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, ha admitido que hubo "fallos de coordinación a la hora de transmitir las órdenes" en los incidentes registrados el 22M, durante las Marchas por la Dignidad, en Madrid, que provocaron, según sus propias palabras, "un número de heridos inaceptable".

Cesa a un mando de antidisturbios
En su comparecencia en la Comisión de Interior del Congreso para explicar los incidentes protagonizados por grupos radicales que acudieron a la multitudinaria manifestación de Madrid el pasado 22 de marzo, Cosidó ha anunciado el cese del jefe de la Primera Unidad de Intervención Policial (UIP), el inspector Javier Virseda, informa EFE.

Archivo de la investigación interna
Varela llevaba el 22-M unos meses en el cargo, al que llegó de la mano del actual Comisario General de Seguridad Ciudadana, Florentino Villabona, otro de los acusados por los sindicatos policiales como responsable de lo sucedido.

Defiende que el despliegue fue correcto
Cosidó ha anunciado este cese pese a que, según ha anunciado, la investigación interna abierta por la Policía para esclarecer el comportamiento del operativo en el 22M se va a archivar "sin poder individualizar posibles irresponsabilidades".

El responsable de la Policía ha defendido que, a pesar de los fallos de coordinación a la hora de transmitir las órdenes que ha admitido, “el despliegue fue correcto, perfectamente diseñado, el evento social fue afrontado por un número idóneo de policías con información suficiente", y ha asegurado que se vivió una “escalada en el nivel de violencia que no había tenido lugar antes”, por parte de “grupos muy radicales”, que “actuaron muy coordinados” dando lugar a “una violencia extrema”.